tag:blogger.com,1999:blog-102143112024-03-13T18:29:04.048-03:00Madonna es mi madrinaNatalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.comBlogger46125tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-64012182580329061312018-01-12T18:28:00.000-03:002018-01-12T18:28:02.852-03:00Banana Yoshimoto: Japón no está tan lejos<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><i><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Nota publicada en el portal de la librería Escaramuza el 11 de enero de 2018: </span></i></span><span style="font-size: 15.6px;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><a href="http://bit.ly/2D8beOp">http://bit.ly/2D8beOp</a></span></span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px;">
Quizá la mayoría de nosotros nunca visitemos Japón, y, sin embargo, hay autores que alimentan nuestros deseos de viajar por sus versiones posmodernas y <em style="color: inherit;">for export</em>de tierras niponas, provocándonos ensoñaciones y nostalgia por lugares que nunca hemos visto. Es el caso de Banana Yoshimoto (Tokio, 1964) autora que, pese a ciertas similitudes, sería injusto colocar a la sombra de Haruki Murakami. Lo que los une, sí, es que son dos de los escritores contemporáneos más populares dentro y fuera del archipiélago.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
La cuenta de Instagram de Yoshimoto muestra fotos de platos orientales tan extraños, coloridos y frugales como su prosa. Desde la aparición de <em style="color: inherit;">Kitchen </em>(1988) primera novela editada cuando tenía veintitrés años, su obra ha dejado entrever un particular interés por la comida: «Estoy interesada en los sentimientos que las personas tienen cuando preparan un plato», dijo. «Cuando comen, los personajes pierden el estado de extrema tensión, se relajan y adquieren de repente el toque humano. Es muy importante describir ese momento y atrapar su humanidad.»</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
Pero <em style="color: inherit;">Kitchen</em> es mucho más que un libro que habla sobre comida. Es una gran novela de iniciación cuyo éxito radica en que nos muestra una generación alejada de la tradición; es un viaje intimista y contemporáneo de la mano de jóvenes angustiados que buscan superar el dolor de la pérdida: un Japón a la medida de los lectores occidentales.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
Yoshimoto se crio en un ambiente más libre que el de la mayoría de los niños japoneses. Su padre Takaaki fue un intelectual y líder del movimiento estudiantil a fines de los sesenta, su madre Kazuco era poeta y su hermana Haruno Yoiko es una reconocida dibujante de manga. En la Universidad de Nihon, en Tokio, decidió comenzar a escribir bajo el seudónimo de Banana (su nombre real es Mahoko) gracias a su amor por la flor del plátano, la que considera «adorable y andrógina». <em style="color: inherit;">Kitchen</em> recibió algunos de los premios literarios más importantes de Japón, pero no fue hasta comienzos de los noventa, cuando se tradujo a varios idiomas, que su popularidad se extendió por todo el mundo.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
Luego vinieron más de una docena de novelas, ensayos y libros de relatos como <em style="color: inherit;">El lago</em>, <em style="color: inherit;">Recuerdos de un callejón sin salida</em>, <em style="color: inherit;">Amrita</em>, <em style="color: inherit;">Lagartija</em>, <em style="color: inherit;">Tsugumi</em>, y el celebrado libro de cuentos <em style="color: inherit;">Sueño profundo</em> (todos editados por Tusquets). El mundo que nos retrata Yoshimoto está lejos de la tecnología enajenante y la Tokio superpoblada. La vida transcurre en una realidad particular, a veces delirante, densa y extraña como un sueño de verano. Sus personajes rara vez salen a la calle, pero hablan con fantasmas, duermen, reflexionan y se despabilan con la pasión por la comida. El mundo interior de los personajes es mucho más rico que el entorno, y sus cavilaciones nos enfrentan a dilemas universales: «Mis novelas y mis ensayos tratan sobre preocupaciones que la gente prefiere evitar o no pensar demasiado. Creo que yo recojo aquel sentimiento abandonado que alguna persona ha evitado afrontar porque le resulta muy duro».</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
Pero sus textos no son tristes o pesimistas. O en parte sí, pero no solamente. A través de una escritura poética, bella y despojada, la autora sabe cuidar a sus personajes. Hay bocanadas de aire fresco, hay delicadeza, florecimiento y contemplación; una fuerza inexplicable que, pese a los conflictos de la vida, los saca a la superficie.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://4.bp.blogspot.com/-DeqgaP-_F8k/WlkoHJSFTRI/AAAAAAAAIX8/lD417OBIytgEO38LCUT-hRh5QVunv3YggCLcBGAs/s1600/banana%2Byoshimoto%2Bfoto.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="1075" data-original-width="1600" height="268" src="https://4.bp.blogspot.com/-DeqgaP-_F8k/WlkoHJSFTRI/AAAAAAAAIX8/lD417OBIytgEO38LCUT-hRh5QVunv3YggCLcBGAs/s400/banana%2Byoshimoto%2Bfoto.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
<br /></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-37407939500265811632018-01-12T18:20:00.003-03:002018-01-12T18:20:58.658-03:00Muriel Spark: el secreto escocés mejor guardado<i><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Nota publicada en el portal de la librería Escaramuza el 11 de diciembre de 2017: <a href="http://bit.ly/2FtHDgZ" target="_blank">http://bit.ly/2FtHDgZ</a></span></i><div>
<i><br /></i></div>
<div>
<br /></div>
<div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px;">
Cuando en 1957 Muriel Spark publicó <em style="color: inherit;">The Comforters</em>, su primera novela, era una mujer de 39 años con una existencia llena de penurias económicas, dolencias físicas y crisis emocionales. Pero a partir de ahí, y durante dos décadas, editó casi una novela al año, además de cuentos, obras de teatro y ensayos, y no le llevó demasiado tiempo convertirse en una de las escritoras británicas más singulares y estimadas del siglo XX.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
Hija de un ingeniero judío y una profesora de música presbiteriana, Muriel Camberg nació en Edimburgo en 1918. Desde muy temprano tuvo interés por la literatura, y a los catorce años ganó una competencia de poesía que conmemoraba el centenario de la muerte de Walter Scott. Siendo muy joven se inscribió en un curso de escritura en el Heriot Watt College de Edimburgo, pero no fue a la universidad, en parte porque sus padres no podían pagarla y en parte porque, según ella, «muchas chicas que estudiaban en la Universidad de Edimburgo eran bastante aburridas y serias, sin estilo o encanto».</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
En 1937 se casó con Sidney Spark, un profesor con el cual se mudó a Rodesia. Allí nació su hijo Robin, y pronto descubrió que su esposo sufría de profundas depresiones y era tendiente a tener fuertes ataques de ira. Regresó sola a Londres en 1944, donde trabajó en la Oficina de Inteligencia redactando mensajes para confundir a las tropas alemanas. Ahorraba dinero para traer de regreso a su hijo, a quien dejó en cuidado de sus abuelos en Edimburgo, y vivió en un hogar para señoritas londinense que luego le serviría de inspiración para su aclamada novela <em style="color: inherit;">The Prime of Miss Jean Brodie</em> (1961), llevada al cine y al teatro.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
Los problemas económicos continuaron luego de la guerra, pero fueron aliviados gracias a su amigo Graham Greene, quien la apoyó con una mensualidad de veinte libras para que continuara escribiendo. Su suerte cambió en 1950 cuando ganó un prestigioso concurso de cuentos en <em style="color: inherit;">The Observer</em>, y un año más tarde publicó una biografía de Mary Shelley que se convertiría en un abordaje fundamental de la autora de <em style="color: inherit;">Frankenstein</em>. En 1954, mientras atravesaba una especie de crisis existencial, decidió convertirse al catolicismo, hecho que tensó la relación con su hijo, con quien apenas tuvo contacto durante el resto de su vida. Ese mismo año, y luego de un tiempo viviendo en Nueva York, se mudó a Roma y luego a Civitella della Chiana, un pequeño pueblo en la Toscana donde vivió hasta su muerte en 2006. En 1992 recibió el Premio T. S. Eliot; en 1993, el título de dama del Imperio británico y, en 1997, el Premio de Literatura Británica.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
La literatura de Spark evade cualquier convencionalismo, es difícil de encasillar y, quizá, es ahí donde reside su fortaleza: irónica, elegante, mordaz, reflexiva y divertida, su legado son libros que se mantienen vigorosos y llenos de encanto. La autora recurre a sus propias experiencias de vida y las manipula a su antojo con una mirada personalísima. La levedad o lo breve de sus textos no la hacen trivial ni impiden que desmenuce con agudeza y pluma innovadora temas como la creación literaria, la religión, la muerte, el poder o las miserias humanas.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
En español se pueden disfrutar varias de sus obras gracias a las editoriales <a href="http://labestiaequilatera.com.ar/" rel="alternate noopener noreferrer" style="background: transparent; color: #79182d; text-decoration-line: none;" target="_blank">La Bestia Equilátera</a> e <a href="http://impedimenta.es/portada.php" rel="alternate noopener noreferrer" style="background: transparent; color: #79182d; text-decoration-line: none;" target="_blank">Impedimenta</a>, que en los últimos años han rescatado título como <em style="color: inherit;">Robinson, Muy lejos de Kensington, La intromisión, Los encubridores, Memento Mori, Las señoritas de escasos medios </em>y<em style="color: inherit;"> Los solteros</em>.</div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://2.bp.blogspot.com/-8sEzdYPNHlo/WlkmLu8YYVI/AAAAAAAAIXw/PPRY5HHn3cYrLOciFFnt0a9N4iG2HDdUACLcBGAs/s1600/murielspark.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" data-original-height="526" data-original-width="720" height="291" src="https://2.bp.blogspot.com/-8sEzdYPNHlo/WlkmLu8YYVI/AAAAAAAAIXw/PPRY5HHn3cYrLOciFFnt0a9N4iG2HDdUACLcBGAs/s400/murielspark.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="background-color: white; color: #212121; font-family: Roboto; font-size: 20px; margin-bottom: 15px; margin-top: 15px;">
<br /></div>
</div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-8525492073125464622015-12-22T11:05:00.001-03:002015-12-22T11:06:49.556-03:00Ya no sé qué camino tomar*<br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<br />
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">1.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">La última vez que estuve en Buenos
Aires fue por amor.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando dejé de tener ese amor, perdí
el interés en
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">volver. Desde entonces la ciudad se
convirtió para mí en
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sinónimo de amor fallido. Buenos Aires
era la responsable
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de mi desazón y no me interesaba nada
de lo que tuviera
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">para ofrecerme. Así que simplemente
dejé de visitarla.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Ahora, después de casi un año, vuelvo
por mí. No
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">regreso para encontrarme con nadie. La
persona amada
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">no me espera a la salida del puerto, y
al parecer duele
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">menos de lo que imaginaba. Sí me
espera un señor al que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">no conozco con un cartel entre sus
manos que lleva mi
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">nombre, escrito con una imprenta azul y
prolija.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Lo saludo con un apretón de manos. Ya
quiero
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">encontrarme con los otros escritores.
Vivir la ciudad
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">desde mi perspectiva.</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">2.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Tomo un taxi a la salida de una fiesta
en San Telmo. Le
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">digo al conductor que voy al Centro
Cultural Recoleta, que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tome por el cementerio y pase la
iglesia. Son las seis de la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">mañana y la ciudad está muy
tranquila. Vamos rápido,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">haciendo en pocos minutos un recorrido
que a media
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tarde en otro taxi me llevó casi una
hora. Hay algo del
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">viajar en taxi, también en Buenos
Aires, que me da pudor.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">O casi vergüenza. Subir a un auto
luego de tomar cerveza
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">y divertirme, y tener que pedirle a la
persona de turno,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">generalmente adormilada, que me lleve a
destino. Miro
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la nuca canosa del conductor y pienso,
como tantas otras
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">veces, en lo solitario de este trabajo,
en las ganas que quizás
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tenga él de estar abrigado en su cama
en vez de dar giros
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">y cuidarse de los rateros en cada
semáforo en rojo. Creo
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que en esta ciudad los taxistas, o los
tacheros, son medio
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">personajes. Están los que se hacen los
amables y luego
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">te pasan billetes falsos, como le pasó
a Elvira el otro día.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Hay de los otros, los realmente
simpáticos, los honestos,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">los que tienen historias interesantes
para contar. Está el
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que nos mostró fotos de él mismo
dentro de una jaula con
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">un tigre de bengala inmenso. O el que
luego de una amena
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">charla sobre las bondades de Montevideo
me vendió un
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">disco de tango a 30 pesos: “Son todos
originales, elegite el
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que más te guste”.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pero ahora con este hablo poco, hacemos
comentarios
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sobre los cortes por la carrera de TC
2000 y los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">embotellamientos; confiesa con voz
cansada que prefiere
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">trabajar a esta hora, que va a
destiempo con el ritmo de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la ciudad pero que no afecta tanto sus
nervios. En los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">momentos de silencio miro hacia afuera,
dejo que me
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">invada el sueño mientras miro portales
de edificios,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">balcones y puertas dobles, fachadas
grises y tan parisinas.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Los grafittis y las pegatinas son la
voz de políticos que no
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">me hablan a mí. Las persianas
metálicas de los cafés están
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">bajas y bien cerradas. La luz
artificial es débil, se deposita
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">en diversos puntos suavemente: tiene
algo romántico,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">propicio para la melancolía. Esta
calma inusual provoca
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">respirar hondo. Bajo la ventanilla y lo
hago.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando nos estamos acercando a destino,
el hombre
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">comienza a contarme la historia del
edificio donde me
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">estoy quedando. “Fue un asilo de
ancianos; un loquero”,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">comienza a decir con voz ronca, y eso
es suficiente para
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que mi atención se fije en los ojos
que me miran por
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">el espejo retrovisor. “Eran todos
predios municipales,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">pero cuando hicieron el Centro
trasladaron a todos los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">viejitos, pobrecitos, andá a saber
dónde los metieron”.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Enseguida pienso en mi habitación,
poblada de camas
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">y con olor a viejo, y me retuerzo en el
asiento. El taxista
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">parece no solo conocer la historia,
sino también conocer
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la fisonomía del edificio. “Salían
a andar y a tomar el sol en
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la terraza, en esa que está por encima
del pasillo”, afirma.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">“Es el balcón que está en mi piso”,
pienso. La foto con la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">cara del conductor está en un papel
plastificado, detrás
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">del asiento del acompañante. Se llama
Carlos Fernando.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">“Gracias, Carlos Fernando”, me
digo. “No voy a dormir por
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tu culpa”. Cruzo con disimulada calma
el pasillo oscuro
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">en dirección a la residencia y trato
de saborear el miedo.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me imagino fantasmas decrépitos
envueltos en batas
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">deshilachadas, agonizantes sobre
colchones de lana, justo</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">en mi habitación. Pero resultan
bastante discretos, y mi
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">presencia les es indiferente. Ni
siquiera se molestan en
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">mirarme cuando me cubro hasta la cabeza
con el acolchado.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">3.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Una de las cosas que me atrae de Buenos
Aires es
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la diversidad cultural y la cantidad de
comunidades de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">diferentes orígenes étnicos y
religiosos. Quizás esto no
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sea algo que haga sentir a los porteños
especialmente
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">orgullosos, pero a mí me hace pensar
en una ciudad
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">verdaderamente cosmopolita y mucho más
rica. Una noche
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">me encontré con unas amigas en un
restaurante peruano
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">ubicado en la zona del Abasto. El
ochenta por ciento de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">las mesas estaban ocupadas por familias
peruanas, y el
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">mismo local era llevado adelante por
una familia andina.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">No se trataba de un lugar refinado ni
que ostentara la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">comida peruana sofisticada y
contemporánea que hoy
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">se considera tan top en todo el mundo,
sino una especie
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de fonda con fuerte olor a frito y
condimentos, con un
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">guitarrista que entonaba canciones
tristes mientras los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">niños correteaban entre los
comensales. Los platos venían
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">con porciones generosas, como si los
hubiese servido una
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">madre, y de hecho mantenían ese sabor
de hogar. El ceviche
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">y la comida chifa no podían faltar, y
ese lugar de encuentro
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">me hizo pensar que esta ciudad es mucho
más que la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">imaginería de sombreros de gacho y
medias de red. Por
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">ejemplo, el supermercado chino al que
voy todos los días a
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">comprar leche, pan y fiambre para la
hora de la merienda.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El muchacho que atiende en la
fiambrería, al fondo del
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">local, apenas habla español. Se las
arregla para entender el</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">pedido con amabilidad, repitiendo como
un eco defectuoso
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">las palabras del cliente. Esta tarde,
al llegar a la cocina de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la residencia y desenvolver el paquete,
me doy cuenta
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que el papel de estraza fue plegado de
forma poco usual,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">doblado aquí y allá como si fuera una
especie de ejercicio
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de iniciación a la papiroflexia china.
Sonrío y mi sándwich
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">está más rico con esta especie de
regalo milenario.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">4.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me pongo mis championes más cómodos y
salgo a
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">caminar sin rumbo. El otoño puso linda
la ciudad y el
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">frío de los primeros días parece
haberse disipado para
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">dejar lugar a una temperatura tan
placentera como la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de una incubadora. Doblo las esquinas
aquí y allá, y voy
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">encontrando calles, baldosas, fachadas
y rostros que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">nunca antes había visto. A diferencia
del resto, que parece
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tener apuro por llegar a alguna parte,
lo mío tiene un dejo
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">turístico: voy a velocidad crucero,
disfrutando del sol en la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">cara y absorbiendo con calma todo el
entorno. El aire huele
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">a smog, a cemento tibio y a árboles
centenarios. Los autos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">recorren las avenidas dejando una
estela de zumbidos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">a la cual una se termina acostumbrando.
Recorro unas
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">cuadras de Santa Fe y hago eso que
tanto me gusta:
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">esquivar y ser esquivada. En Montevideo
no tenemos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">concentraciones de personas tan densas
como acá; donde
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">más nos amontonamos es en los ómnibus
y ese no es un
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">acontecimiento particularmente
agradable. Pero acá los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">transeúntes dan a las veredas una
impronta de vitalidad, la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">ilusión de que están pasando cosas
importantes. Acelero
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">el paso y casi sin pensarlo desaparezco
en la primera</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">entrada de subte que encuentro. Espero
pacientemente
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">detrás de la línea amarilla y me
maravillo como otras
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">veces de este espacio paralelo, con una
lógica y ritmos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tan diferentes a los de la superficie.
Me emociona la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">vibración in crescendo, el sonido
metálico que se acerca
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">a la estación, el resoplido de las
puertas al darnos paso.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me subo al vagón y me dirijo no sé
bien adónde, quizás
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">algunas paradas más hacia el Centro,
solo para transitar
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">un poco el mundo por este lado.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">5.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Los parques son los pulmones y centros
de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">esparcimiento de esta ciudad que le da,
no sé por qué, la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">espalda al río. Siempre me llama la
atención ver a bañistas
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sin arena, personas en bikini y traje
de baño acostadas en
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">el medio de la ciudad; es ridículo,
pero lo siento casi como
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">un acto impúdico si no hay agua
cerca.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me reúno con unas amigas para tomar
mate sobre
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">el césped y aprovechar el sol de la
tarde. Entre cebada y
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">cebada voy husmeando lo que pasa
alrededor. A unos pocos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">metros una mujer juega con sus dos
perros. Ejemplares
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de raza, pequeños, muy bien cuidados.
Les tira pelotas
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de tenis y los alienta con palabras
dulces. Se la ve feliz y
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">compenetrada con cada hazaña de sus
cachorros.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">A los pocos minutos llega otra mujer,
también con su
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">perro. Ambas se saludan con un beso en
la mejilla. Los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">perros también se saludan. La recién
llegada tiene el
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">rostro deforme por las cirugías, la
boca violentamente
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">pintada y el pelo recién salido de la
peluquería. Al rato dos,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tres, cuatro señoras más llegan con
sus compañeros y les</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sueltan la correa. Todas se conocen.
Los perros celebran a
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">los recién llegados. Corren
frenéticamente, se persiguen,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">dan saltos inesperados ante sus amas.
Ellas se carcajean,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">les celebran cada nueva ocurrencia,
ponen límites sin
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">convicción. A veces detienen la charla
para mimarlos,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">acariciarlos y hablarles con voz
aniñada. Sacan comida de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">una bolsita, los premian.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me olvido de la escena por un rato y me
concentro
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">en nuestra charla, que solo es
interrumpida minutos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">después por un perrito que se acerca,
que huele nuestras
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">pertenencias y nos lame la cara. Su
ama, la señora de las
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">cirugías, está de pie a pocos pasos.
Mira el cielo y nos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">pregunta: “¿Conocen esa luna?”.
Desconcertadas, giramos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">las cabezas hacia la luna creciente.
“Es la mejor luna para
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tomar decisiones, para casarse, para
enamorarse, para
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">empezar cualquier cosa”, dice con
entusiasmo. No lo sabía.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">“También para cortarse el pelo”
acota una de mis amigas.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">La dama del perrito sonríe y
desaparece tan rápido como
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">llegó. En el aire queda sorpresa,
desconcierto, y un poco
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de olor a caca de perro. La luna sigue
llenándose aunque
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">no nos demos cuenta.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">6.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">¡Ah! Las librerías. Placer supremo.
Significa tener
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">acceso a cosas que en Montevideo es
difícil o incluso
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">imposible conseguir. Muchas tienen el
valor agregado de
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">un café, una vinoteca, esas cosas que
hacen a la lectura
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">más amena y acogedora. No sé cómo
voy a disponer en
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la valija los libros que compro, pero
eso es algo de lo que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">me preocuparé el último día. Por
ahora libros es lo único
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que llevo. Elijo una antología de
escritores porteños, una
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">edición del irreverente Copi que
incluye el cuento “El
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">uruguayo”, un libro de haikus de
Ryookan, uno de Neil
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Gaiman para mi sobrina y varias cosas
más. En una librería
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de Palermo me nace un nacionalismo
absurdo y me doy
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">el gusto de pelear un poco a la dueña
y a los empleados.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Un libro de Horacio Quiroga se muestra
orgulloso en la
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sección de literatura argentina. “Acá
hay un error”, les
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">digo, y tomo el libro. “Horacio
Quiroga es uruguayo, lo voy
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">a poner acá” y lo dejo una
estantería más allá, en literatura
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">hispanoamericana. Antonio está conmigo
y celebra mi
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">acto chauvinista. Solo a él parece
causarle gracia mi
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">intervención. Los demás sonríen a
medias, levantan los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">hombros como diciendo “Bueno, es
rioplatense”. De hecho,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">desde atrás del mostrador alguien dice
algo de eso, que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Quiroga también les pertenece.
Recuerdo a una amiga
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que insiste en que los argentinos, o
más bien los porteños,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tienen la manía de apropiarse de todo,
que ya es como un
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">deporte nacional, y que tenga cuidado
porque también
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">puede pasarme a mí. Doscientos años
de historia resumidos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">en dos secciones de una librería,
porque la hermana mayor
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">amenaza nuestra autonomía también en
la literatura. Y
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">yo, en tierra extranjera, me pongo
tontamente camisetera,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">como si eso realmente me importara,
como si Horacio
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">necesitara de mi mano justiciera, o
como si su nacionalidad
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">fuera realmente lo importante. En estos
días los libros y los
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">lectores de Buenos Aires viven cosas
peores: una normativa
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de la secretaría de Comercio Interior
que amenaza con
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">trancar publicaciones extranjeras. La
gente se alarma con
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">razón, y se torna un tema nacional que
afortunadamente no
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">pasa a mayores. Un susto que deja en
evidencia que lo más
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">importante no es en qué estantería
estén los libros, sino
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">simplemente que estén.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">7.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Azcuénaga es tu calle. Es una calle
larga, que comienza –
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">irónicamente– ahí donde termina la
vista desde mi ventana.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Su nombre, lo sé ahora, se refiere a
Miguel de Azcuénaga,
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">que yace a pasos también de mi
habitación, en el cementerio
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">de la Recoleta. A la calle siempre le
dijimos “Azcue” como
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">sinónimo de refugio transitorio, tu
hogar en una ciudad que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">no nos pertenece. Hoy no tengo por qué
recorrerla, pero lo
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">hago. Es una de las pocas calles en
esta ciudad que tiene un
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">significado para mí, que conozco palmo
a palmo. Me deslizo
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">como llevada por la corriente. Parezco
movida por un GPS
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">rústico y emotivo; soy un caballo de
balneario, de los que
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">siempre vuelven a casa solos luego del
mismo paseo. No
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">voy a tu encuentro, pero la calle, solo
con su nombre en las
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">esquinas, me transporta a un lugar
reconocible y seguro.
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">¿Estarás en la cocina? ¿Ordenando tu
cuarto? Me detengo
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">por curiosidad en la vidriera de una
agencia de viajes. Dos
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">banners que miran hacia la calle hablan
de Cancún, Playa
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">del Carmen, Florianópolis o destinos
así, llenos de arena
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">blanca y agua transparente. Lugares
para enamorarse u
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">odiarse. Lugares de los que no se puede
escapar. ¿A dónde
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">ir? Del hotel a la playa, de la playa
al hotel. Buenos Aires
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">tiene tantos vericuetos, puntos y
líneas punteadas, tantas
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">alternativas y vías de escape, que no
puedo seguirte. Azcue
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">va hacia tu casa. Hacia vos, ya no sé
qué camino tomar. No
</span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">hay Guía T que me lo explique.</span></div>
<br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://3.bp.blogspot.com/-g9-hDuN-IuA/VnlYKjknZ0I/AAAAAAAAG2c/7Pka8GDUSBY/s1600/la-ciudad-contada.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="http://3.bp.blogspot.com/-g9-hDuN-IuA/VnlYKjknZ0I/AAAAAAAAG2c/7Pka8GDUSBY/s400/la-ciudad-contada.jpg" width="400" /></a></div>
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><br /></span></b>
<b><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*La Ciudad Contada</span></b><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Buenos Aires en la mirada de la nueva narrativa hispanoamericana. (Antología) 2012</span><br />
<br />
<a href="http://letras.s5.com/la_ciudad_contada.pdf" style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">http://letras.s5.com/la_ciudad_contada.pdf</a><br />
<br />
<br />Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-74743800409112435782015-11-08T11:47:00.001-03:002015-11-24T14:29:49.868-03:00Café Literario Una charla con el periodista Alfredo Fonticelli.<br />
<br />
Hablamos de literatura, pero también sobre música, comics, Madonna y la Mujer Maravilla.<br />
<br />
<br />
<br />
<iframe allowfullscreen="" frameborder="0" height="270" src="https://www.youtube.com/embed/F27ZeQqqcFE" width="480"></iframe>Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-16999918859558749382015-10-08T22:20:00.000-03:002015-10-08T22:20:55.517-03:00Planeta Wakhker*<br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando
llegamos al planeta Wakhker aún era de día. La escotilla de la nave se abrió y
encendimos el mecanismo de la escalera. Mientras esperábamos que se instalara
miramos el panorama. Los famosos búfalos robóticos de los que habíamos leído en
la Academia caminaban y levantaban polvo alrededor de la pista de aterrizaje.
Eran parte del comité de bienvenida. Búfalos metálicos que hacían el ademán de
pastar y de mirar hacia el horizonte, pero que no respiraban porque estaban
rellenos de circuitos, cables y soldaduras. Ahora podía agregar a mis
experiencias de viaje el haber visto búfalos. En la Tierra estaban extintos,
pero al menos en esta parte del universo podía encontrarme con los famosos
especímenes de Wakhker. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Un
humano con aspecto de hippie de Woodstock me recibió en la pista. Era uno de
los tantos voluntarios y amantes de la cultura nativa norteamericana que se
habían instalado en este planeta para preservarla, o al menos reproducirla
lejos de la Tierra. De hecho allí las antiguas tribus eran casi un mito, una
leyenda difícil de rastrear. No quedaban evidencias de su pasaje por las vastas
llanuras, y lo poco que había sobrevivido había sido rescatado y trasladado a
Wakhker con fervor religioso.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Los
humanos que se trasladaron a este planeta no necesariamente tenían sangre
cherooke, miwok, nootka o sioux. Algunos eran descendientes de las antiguas
tribus, pero otros, como este sujeto que me esperaba, eran seguidores
entusiastas de los amerindios del norte y entregaban su vida a la titánica
tarea de volverlos a la vida en un nuevo destino.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Recorrimos
a caballo un par de kilómetros hasta llegar a Gadohi, la población más cercana.
El paisaje era árido y rojizo, pero se adivinaba en el horizonte el joven e
inmenso bosque espiritual de piceas, cedros y pinos, indispensable para la
medicina de los lugareños. Al final del camino se alzaban decenas de tipis. Se
recortaban majestuosamente contra el cielo plomizo; algunos humeaban, pero no
se avizoraban sus habitantes. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Dejamos
los caballos junto a otros que pastaban al borde del camino y nos adentramos en
la población. Mágicamente aparecieron niños que nos miraban con curiosidad y
que le hablaban al guía en una lengua que yo desconocía. El hombre pareció
preguntarles algo y uno de ellos se nos adelantó.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span lang="ES-TRAD">—</span><span style="color: #222222;">Es
el hijo menor del jefe Seatl.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El
jefe Seatl era el hombre que yo había ido a ver. Debía entregarle un mensaje de
mi Capitán. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El
niño entró a un tipi que se encontraba en el medio del poblado. De la tienda -hecha
de una especie de lona náutica- se asomó la cabeza de una mujer de mediana
edad, de ojos pequeños y pelo color azabache. Escuchó lo que el guía tenía para
decirle e inmediatamente nos invitó a pasar. Una vez dentro comprobé que la
vivienda era más grande de que lo que parecía desde afuera. Saludé a la mujer
con un movimiento de cabeza y noté con tenía el vientre redondo y amplio. Hacía
muchos años que no veía a una mujer embarazada. Qué extraño encontrarme con
algo tan en desuso, una matrioska de carne y hueso. Me costó sacarle los ojos
de encima. Frente a nosotros, cerca del fuego, una silueta en cuclillas y envuelta
en una manta de lana nos daba la espalda. Un niño de párpados apretados yacía
en el suelo en una especie de saco de
dormir. La mujer dijo algo en voz baja, el guía asintió y luego se dirigió a
mí.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span lang="ES-TRAD">—</span><span style="color: #222222;">El
jefe Seatl está preparando un brebaje de cálamo. Su hijo mayor está enfermo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Entonces
nos quedamos en silencio, de pie, esperando que algo sucediera. Pasaron quizás
un par de minutos, y cuando la situación comenzaba a incomodarme la silueta se
movió. Nos mostró su perfil y en la penumbra percibí su piel. Levantó la cabeza
del niño y colocó en sus labios un cuenco. El niño, obediente, bebió. El jefe
Seatl volvió a darnos la espalda y se puso de pie. Pensé que iba a llegar a lo
más alto de su tipi. Era inmenso. Giró y vino a nosotros con paso lento. Se
detuvo a poco más de un metro y saludó con un movimiento de cabeza. Hice lo
mismo, y enseguida miré a mi acompañante en busca de apoyo, de una señal que me
dijera qué había que hacer a continuación. Si bien sabía que no debía temer, la
inmensidad del jefe me había dejado perpleja. Pero el hombre a mi lado estaba
encandilado, quizás por la aleación de metales de aquel majestuoso anfitrión.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Entonces
recordé a lo que había venido, y busqué en mi morral el sobre que me había
confiado el Capitán. Se lo extendí. El jefe Seatl lo tomó con tanta delicadeza
que sentí que el sobre simplemente había sido teletransportado hacia su mano. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Lo
abrió y quitó la carta de su interior. La leyó, o al menos eso me pareció, y
luego me miró. De la zona de su boca apareció una lengua larga y filosa.
Retrocedí un paso. Sus ojos se encendieron. Y entonces comenzó a hablar. Pero
ni la boca ni la lengua articulaban sonido. La voz clara y humanoide provenía
de su interior, fuera lo que fuese lo que tenía ahí dentro. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span lang="ES-TRAD">—</span><span style="color: #222222;">Ninguna base terrícola se
instalará en este planeta. Ninguna </span><span lang="ES-TRAD">—comenzó a decir—.</span><span lang="ES-TRAD" style="color: #222222;"> </span><span style="color: #222222;">Ya corrompieron su hogar,
ya murieron en su propia mugre. Domaron todos los caballos y eliminaron los
búfalos. Invadieron hasta el último secreto del bosque. Aquí estamos en casa y
nuestra tierra no está en venta. Dígale eso a su jefe. Siempre habrá un lugar
para un visitante, para un amigo, para un viajero cansado de las estrellas.
Pero haremos las cosas diferentes. El Gran Espíritu fue muy claro. Los humanos
no forman parte de este nuevo plan </span><span lang="ES-TRAD">—</span><span style="color: #222222;">dijo, y me extendió la carta y el sobre. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Se suponía que yo estaba en
ese lugar para funcionar como intermediaria, para negociar y lograr el mejor
resultado para mi Capitán y la tripulación. ¿Pero qué podía hacer? El Jefe
Seatl se había dado la vuelta, había dado por terminada la reunión.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Estaba a punto de decir
algo cuando el guía me tomó del brazo. La mujer corrió la tela del tipi y nos
invitó a retirarnos. El hijo menor nos miraba indiferente desde un rincón,
mientras el jefe volvía a su medicina y al niño enfermo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Dejamos que los caballos
regresaran mansamente. La noche se acercaba y el aire frío del este nos
mantenía rígidos en nuestras monturas. Pensaba en la cara del Capitán cuando le
devolviera el sobre. Por alguna razón me causaba más gracias que preocupación.
Mi Capitán siendo rechazado. Seguramente era un espectáculo digno de verse. Tanto
como el águila calva que comenzó a volar en círculos sobre nuestras cabezas. El
hombre sonrió. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span lang="ES-TRAD">—</span><span style="color: #222222;">No se preocupe, todo va a
estar bien </span><span lang="ES-TRAD">—</span><span style="color: #222222;">dijo señalando el ave</span><span lang="ES-TRAD">—. </span><span style="color: #222222;">El gran chamán hará que este viaje no haya
sido en vano, ya verá. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"> </span><span style="font-family: Cambria, serif;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoBodyText">
<br /></div>
<div class="MsoBodyText">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://3.bp.blogspot.com/-9Gic1YiJEYI/VhcVzcd-UqI/AAAAAAAAFAQ/MdwET15rX0Q/s1600/tipi.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="234" src="http://3.bp.blogspot.com/-9Gic1YiJEYI/VhcVzcd-UqI/AAAAAAAAFAQ/MdwET15rX0Q/s320/tipi.jpg" width="320" /></a></div>
<br />
<div class="MsoBodyText">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoBodyText">
<br /></div>
<div class="MsoBodyText">
<span style="font-size: x-small;"><o:p>*</o:p><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;"> Una historia perdida de “Guía para un universo”</span></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-60560027284432061382015-10-08T21:49:00.004-03:002015-10-08T21:49:54.295-03:00Ultratón*<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%;">
<br /></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 150%;">
<span lang="ES-MX" style="line-height: 150%;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me enteré muy temprano, leyendo los
titulares de los diarios en el quiosco.
“Incógnita: Ultratón desapareció del depósito de Canal 12”. El juez
galáctico-televisivo que observó a más de una generación infantil había sido
robado. Enseguida compré un diario. Con la nota se adjuntaba una foto añeja, de
cuando el robot era toda una institución, y el corazón se me hizo añicos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando llegué a la facultad me enteré que esa noche se
armaba una marcha por 18 de Julio. Ultratón tenía que aparecer, o íbamos a
envejecer sintiendo que nos habían quitado un brazo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando fuimos al bar de la esquina la radio estaba
prendida y escuchamos a Emiliano Cotelo hablar por teléfono con Cacho de la
Cruz. Al parecer Cacho se adhería a nuestro dolor, pero en ese momento sentí
que no era totalmente consciente de lo que esto significaba para nosotros.
Habíamos crecido bajo la mirada atenta de aquella máquina, le habíamos tenido
respeto, cariño, amor, y a veces hasta un poco de miedo, porque él nos
observaba desde el cielo durante la semana, y después exponía nuestras peores
faltas ante todos. Ultratón nos había hecho crecer como personas rectas. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">A las ocho en punto comenzó la marcha, y los ánimos se
entremezclaban. Estaban los que andaban silenciosamente, con paso lento, y
estaban los que prefirieron recordarlo con más alegría. Un chico de Psicología
se había improvisado un traje con un tanque y unas mangueras gruesas que
actuaban como brazos. Más allá un grupo no cesaba de repetir con euforia: <i>“Desde la inmensidad del espacio... llega
para los niños... ¡Ultratoooooon!...”</i>. Y continuaban con fervor: <i>“Decir cosas feas, es asunto grave, antes de
decirlas, ¡boquita con llave!”</i>. Al ver todo eso se me hizo un vacío en el
pecho, lleno de melancolía. Por mi cabeza pasaron miles de imágenes, algunas en
blanco y negro y otras en color. Casi podía sentir esas tardes de sábado frente
a la tele, los restos de “Ricardito” alrededor de mi boca, las cajitas de
caramelos “Plucky”, “Alejandro Vascolet” caminando por la pared, el trencito trucho
de las galletitas “Chiquilín”, las bolsitas de “Tico-tico”... <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuanto más avanzábamos, más gente se nos unía, pero
las edades ya habían dejado de ser tan parejas. Los que subestimaban el poder
de ese tanque de lata, comenzaron a darse cuenta que la cosa venía en serio.
Algunos políticos hicieron declaraciones, expresando que “lamentaban mucho lo
sucedido, y eran conscientes de que Ultratón era prácticamente un patrimonio
nacional”. Incluso se corrió la bola de que un partido quería incluirlo entre
sus candidatos para las próximas elecciones. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Al final de la marcha éramos miles de personas. En la
plaza Cagancha se improvisaron varios “palos enjabonados” y nos quedamos hasta
pasada la medianoche. Nos fuimos a
dormir con más esperanza.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">A la mañana siguiente fui directo al quiosco. Desde
lejos lo reconocí en la portada de todos los diarios. Ahora ocupaba toda la
portada. Ultratón había sido hallado en la madrugada flotando en el arroyo
Miguelete. Lo mostraban recién sacado del agua, chamuscado, con basura entre
sus brazos, mientras tres bomberos lo sostenían. Había un solo sospechoso:
Cacho de la Cruz. La muchacha del quiosco sonrió. “Mirá si va a ser el Cacho…
estos del diario inventan cualquier cosa… ¿para que iba a querer tirarlo en el
Miguelete?”. Yo me encogí de hombros, pero la pregunta anduvo en mi cabeza
durante todo el día. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText2">
<span lang="ES-MX" style="line-height: 150%;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">La
incógnita se mantuvo hasta esa tarde, cuando el payaso Pelusita se declaró como
cómplice de Cacho. Vi cuando lo entrevistaban en el informativo. “Cacho me
pidió que lo ayudara”, dijo. “Habíamos tomado unas copas y recordamos viejos
tiempos y nos dimos cuenta que los chicos que nos miraban sólo recordaban a
Ultratón, que pedían su retorno, ya sea para sus hijos, sobrinos, lo que
fuera…” y prosiguió: “a Cacho le molestó que ese tanque de lata tuviese con el
tiempo más popularidad que él… así que fuimos al depósito, forzamos el candado
y lo robamos… Después pasó lo que ustedes ya saben…”<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cacho y Pelusita quedaron libres. Ahora sólo falta esperar el nuevo programa
que va a lanzar Canal 12 dentro de pocos días: “El show de Ultratón”. Me alegro
por él, pero para mí siempre se verá mejor en blanco y negro. </span><span style="font-family: Tahoma, sans-serif;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://4.bp.blogspot.com/-YBFtShr3HzQ/VhcOzUgsJBI/AAAAAAAAE_8/FiipI-1MJuI/s1600/12088092_10207511309598151_3570149392930945801_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="http://4.bp.blogspot.com/-YBFtShr3HzQ/VhcOzUgsJBI/AAAAAAAAE_8/FiipI-1MJuI/s320/12088092_10207511309598151_3570149392930945801_n.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span lang="ES-MX"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;">*Cuento de "Posmonauta", 2001.</span></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<br /></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-10618909568073450552015-07-08T14:39:00.000-03:002015-10-08T22:09:39.796-03:00Los libros de tu vida<br />
<div style="background-color: white; border: 0px rgb(230, 230, 230); line-height: 20px; margin-bottom: 20px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">
<br /></div>
<div style="background-color: white; border: 0px rgb(230, 230, 230); line-height: 20px; margin-bottom: 20px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">
<b>Los libros favoritos de Madonna:</b></div>
<ul style="background-color: white; border: 0px rgb(230, 230, 230); line-height: 20px; list-style-image: initial; list-style-position: initial; margin: 0px 0px 0px 20px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">War and Peace</em> - León Tolstói </span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">To Kill a Mockingbird</em> - Harper Lee</span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">The Catcher in the Rye</em> - JD Salinger</span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">The Heart is a Lonely Hunter</em> - Carson McCullers</span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">For Whom the Bell Tolls</em> - Ernest Hemingway</span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">As I Lay Dying</em> - William Faulkner</span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">Giovanni’s Room</em> - James Baldwin</span></li>
<li style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-style: inherit; font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 3px 0px; vertical-align: baseline;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><em style="border: 0px rgb(230, 230, 230); font-variant: inherit; line-height: inherit; margin: 0px; padding: 0px; vertical-align: baseline;">The Bell Jar</em> - Sylvia Plath</span></li>
</ul>
<div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="line-height: 20px;"><br /></span></span></div>
<div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="line-height: 20px;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://1.bp.blogspot.com/-bEXF9ITr0iA/VZ1fx0VWeOI/AAAAAAAAEbQ/xPkKhVeMAyw/s1600/madonna%2Blee.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="372" src="http://1.bp.blogspot.com/-bEXF9ITr0iA/VZ1fx0VWeOI/AAAAAAAAEbQ/xPkKhVeMAyw/s400/madonna%2Blee.png" width="400" /></a></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<a href="http://attitude.co.uk/madonna-reveals-books-changed-life/"><span style="color: black; font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;">http://attitude.co.uk/madonna-reveals-books-changed-life/</span></a></div>
<div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="line-height: 20px;"><br /></span></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-88232652076131705202015-05-15T14:20:00.001-03:002015-05-15T14:22:29.315-03:00Los bolches<br />
<div class="western" lang="es-UY">
</div>
<div class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%; text-align: justify;">
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
</div>
<div class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%; text-align: justify;">
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando estaba en el liceo
mis amigos y yo éramos los bolches. Era el rótulo que nos habían
puesto los demás. Eso quería decir que tomábamos como propias
todas las causas, hasta las perdidas o las inexistentes. Éramos los
primeros en salir a defender al compañero suspendido por romper el
vidrio de una ventana de un pelotazo, o a la piba que se había
anotado todo el resumen de biología en el dobladillo de la pollera.
Sentíamos que todo era una mierda, y a la vez, no. Antes de entrar
nos juntábamos en las escaleras. Tomábamos mate y fumábamos. Nico
llevaba la matera, el mate y el termo, y entre todos hacíamos la
baquita semanal para comprar yerba. Cuando faltaba algún profesor, o
cuando simplemente no pintaba entrar a clase, jugábamos al truco en
el bar de la esquina. El gallego no nos quería vender cerveza, pero
si no hacíamos mucho barullo nos dejaba ocupar una mesa. Qué botón
el gallego. Bien que cuando iban las trolas de la otra clase y le
hacían caiditas de ojos les regalaba un chop para que lo tomaran
entre todas. Nosotros no nos quemábamos. Con el mate lavado la
íbamos llevando. Lo importante eran los campeonatos de truco que
armábamos. Eran impresionantes. A Nico y a mi casi nunca nos
ganaban. Éramos la pareja top entre los bolches. La pareja linda. Yo
usaba la camisa leñadora de Nico. Y teníamos el pelo igual de
largo. Me encantaba el pelo de él, me gustaban los pibes de pelo
largo en esa época. Y pensaba que me gustaba su aliento a tabaco y
yerba, y su olor a jabón de lavar y a humedad. Siempre estábamos
juntos. Llegábamos al liceo de la mano, y a la salida me acompañaba
a la parada del ómnibus. Éramos los que llevábamos la batuta en
las asambleas. Aunque yo era más la secretaria que tomaba nota y él
era como la versión <i>teen </i>del Che. Nico era respetado. Tenía
ese aire místico cuando se quedaba pensativo y cebaba mate. A mi me
gustaba su lado justiciero, su permanente estado de alerta frente a
la autoridad. Un invierno hubo una marcha de todos los liceos. Fue
increíble. Estuvimos una semana pintado banderas y armando
pancartas. Y él iba delante de nosotros, con la cara tensa, animando
a todos a seguirlo con los cánticos y las palmas.</span></div>
</div>
<div class="western" style="line-height: 200%; text-align: justify;">
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span lang="es-UY">Todo
era así, lindo. Las remeras Hering negras se iban destiñendo, y a
mi me parecía que era lo único que perdía color. Hasta que pasó
lo que tenía que pasar. Resulta que entró un pibe nuevo. Hank. Era
hijo de un inglés. Era medio concheto. Todos los días se paraba el
jopito con gel. Tenía un par de remeras Lacoste y un vaquero Pepe
Jean que le había traído el viejo de Londres. Y se afeitaba los
tres pelos que tenía, pero se ponía un </span><span lang="es-UY"><i>after
shave</i></span><span lang="es-UY"> que nos empezó a tener locas a
todas. Hasta a nosotras, que parecía que esas cosas no nos iban. Si,
a las bolches, las hippies, las sucias. Porque preferíamos ser eso
que ser las conchetas, las huecas. Las que iban a bailar marcha todos
los sábados. Todas esas lo rodeaban. Pero él se hacía amigo de
todo el mundo. Era como que no tenía prejuicio con nadie. Un día se
puso a jugar al truco con nosotros. Y hasta nos consiguió cerveza,
porque al gallego le gustó eso de tener a un inglés en el bar
mugroso. Era bueno jugando al truco. Le dio unas cuantas palizas a
Nico. Yo pensé que Nico lo iba a empezar a odiar, pero cosa rara, se
hicieron amigos. Muy amigos. Entonces los tres fuimos inseparables.
Él también me acompañaba a la parada. Iba con nosotros a todos
lados. A mi no me molestaba. A Nico tampoco. Pero no pasó mucho
tiempo hasta que a mi me empezó a molestar Nico. Quería estar sola
con el inglés. Las veces que nos habíamos puesto a charlar sin Nico
en el medio, yo sentía que flotaba. Se podía hablar de todo con el
inglés. Era conversador, no como Nico. Y como tenía tres hermanas
mayores, se sentía cómodo entre mujeres, y entendía todo. Terminó
de conquistarme una tarde que yo tenía dolores menstruales y fue
hasta la farmacia a comprarme un remedio, y ni tuve que decirle cuál,
y después me preguntaba cómo me sentía y me miraba con ternura
como si fuese una enferma terminal. Empecé a sentirme fea al lado de
él. Le devolví la camisa leñadora a Nico y me compré un busito
nuevo. Me dejaba más seguido el pelo suelto, y aunque no sabía nada
de inglés, ya que iba en contra de mis principios, escuchaba
atentamente los cassettes que Hank me grababa con bandas del under
londinense, y él trataba de familiarizarse con los que yo le
grababa, cosas de Charly García, </span><span style="color: black;">Legião
Urbana </span><span lang="es-UY">y Los toreros muertos. Nico no decía
nada. Así que yo seguía haciendo la mía, tratando de quedarme sola
con el inglés y poniéndome celosa si él hablaba con alguna otra.
La última semana de clases se armó un gran campeonato de truco. “El
desafío final” le pusimos. Lo tomamos muy en serio. Vivíamos
instalados en el bar del gallego. Éste se puso pesado porque nunca
le consumíamos nada, así que le dimos el gusto y pedíamos una
botella grande de pomelo para todos. Otros compañeros de clase
venían a rodear la mesa. El bar se convirtió en una extensión del
liceo, y los parroquianos de la barra nos empezaron a mirar mal. El
campeonato fue peleadísimo. Como era de esperar Nico y Hank quedaron
en la final, sacándose chispas. Estaba medio liceo ahí, esperando
por la definición. Nunca se supo quién ganaría. Porque a un
pelotudo se le ocurrió gritar en medio de la montonera: “Y por qué
juegan, ¿a ver quién se va a tirar a la Lorena?” </span>
</span></div>
</div>
<div class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%; text-align: justify;">
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Y la Lorena era yo.
</span></div>
</div>
<div class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%; text-align: justify;">
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">En vez de levantarse a
trompear al que había gritado, Nico me mandó una mirada de odio, y
después perdió su calma habitual y se lanzó arriba de la mesa,
derechito al cuello del inglés, y la botella de pomelo casi vacía y
los vasos volaron y el gallego se calentó y con ayuda de los viejos
de la barra que estaban esperando la más mínima falta de nuestra
parte, los agarró y los sacó del brazo para la vereda y les dio un
sermón que parecía que iba a durar toda la tarde. Después del
espectáculo la cosa se disolvió y cada uno se fue para su casa, y
yo me quedé ahí sin saber qué hacer, sintiéndome rara por tener
que ir a la parada sola.</span></div>
</div>
<div align="JUSTIFY" class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div align="JUSTIFY" class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://3.bp.blogspot.com/-AJLwlF1-No8/VVYqktaNPLI/AAAAAAAAEPk/UC0ZdcyJRko/s1600/liceo-16_310713.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="251" src="http://3.bp.blogspot.com/-AJLwlF1-No8/VVYqktaNPLI/AAAAAAAAEPk/UC0ZdcyJRko/s400/liceo-16_310713.jpg" width="400" /></a></div>
<div align="JUSTIFY" class="western" lang="es-UY" style="line-height: 200%;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<br />Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-50194787500266677452015-05-12T12:04:00.001-03:002015-05-12T12:04:23.897-03:00Actor hiperrealista<br />
<br />
<div class="western" lang="es-UY" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Me
presento. Soy actor hiperrealista. No hay mucha diferencia con un
actor regular, a no ser porque tengo que ponerme literalmente en el
lugar del personaje. Antes de interpretar a un bombero me entrené
como tal y me convertí en uno. Nunca ejercí. Sólo interpreté a
uno. Muy heroico, eso sí. Cuando hice de un tipo acabado, apostador
y borracho, me sumergí en las carreras y el alcohol. Mi hígado se
enfermó, mi familia me abandonó, pero no podía dar marcha atrás,
lo requería el personaje. Perdí toda la plata en el casino, en el
hipódromo, en las riñas de gallo. Dejé de bañarme y de afeitarme,
y por poco casi olvido que todo era para crear al personaje. De hecho
resultó tan creíble que recibí varios premios ese año. Luego me
llamaron para interpretar a un simpático travesti que se prostituía
para juntar dinero para el cambio de sexo. Entonces me bañé, me
afeité, me olvidé de las apuestas y del alcohol, y empecé a hacer
la calle. Estoy desarrollando un papel muy convincente, creo que será
un éxito en la obra, más que el bombero. Mi clientela aumentó,
pude ahorrar bastante, y ya tuve entrevistas con el cirujano y el
psiquiatra. Dicen que estoy listo. Me hace sentir bien que se hayan
creído mi interpretación, quiere decir que voy por buen camino.
Espero que la operación no interfiera con el estreno de la obra.</span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-24469549076998724402015-05-07T15:23:00.001-03:002015-05-19T15:02:13.245-03:00Gay Talese. Retratos y encuentros de un periodista excepcional<br />
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: arial, sans-serif;"><span style="font-size: small;"><span style="font-family: Georgia;"><i>"Hay
que tener curiosidad, paciencia y perseverancia, pero la cualidad más
importante es la paciencia. Por eso cuando un director o algunos de
los que están arriba te meten presión e impaciencia, que es lo que
domina en la cultura y el periodismo, alimentado por internet, hay
que recordarles que si quieren calidad se necesita tiempo, y así se
creará un producto bello". </i></span><span style="font-family: Georgia;">Gay
Talese.</span></span></span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;">Al leer el
artículo escrito por Gay Talese sobre el boxeador Joe Louis, Tom
Wolfe lo bautizó como “el padre del nuevo periodismo” (aunque a
Wolfe también le han dado esa etiqueta). Talese rechazó el rótulo
con su elegancia natural, alegando que nada de lo que aparecía en
ese reportaje era nuevo para él.</span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;">Hijo de un
sastre de Calabria y de una madre italoamericana, Talese se crió en
New Jersey tras el mostrador de la tienda de ropa de sus padres,
donde aprendió a escuchar, a observar a los clientes con atención.
Allí encuentra él la base de su forma de contar, de ese periodismo
que se disfruta como buena literatura, que hace énfasis en los
detalles para revelar la verdad de los personajes sin olvidar la
importancia de una frase bien escrita.</span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;">A sus 78
años, Talese sigue activo, despierto y manteniendo su espíritu de
dandy rebelde. Ataca a los periodistas de la era de internet, que
crean sus notas desde atrás de un escritorio. “<i>Lo que
tienes que hacer es salir y buscar la información. Es muy importante
escuchar y ver los gestos de las personas cuando hablan. No se trata
de conseguir la información desde tu entorno, sino en el entorno en
el que esas personas están. Tiene que haber un contacto físico con
la persona a la que quieres describir”</i>.</span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;"><b>Retratos y
encuentros </b>(Alfaguara) reúne algunos de sus trabajos más
emblemáticos, como la crónica “Frank Sinatra está resfriado”que
publicó en 1965 en Esquire, y que fue elegida en 2003 como la mejor
que se haya impreso en esa revista. Una joyita que no solo desnuda a
un personaje icónico, sino que entretiene y atrapa como la mejor
ficción. También deambulan personajes como Muhammad Alí, Fidel
Castro o Joe DiMaggio. Amantes del buen periodismo y de la buena
literatura, encontrarán en este volumen buenas dosis de ambos.</span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;"><br /></span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;"><br /></span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;"><br /></span></span></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://2.bp.blogspot.com/-_jrh3sBitIQ/VUutelHIyLI/AAAAAAAAEN0/76h3FZlno7Y/s1600/gay-talese-and-what-makes-a-man-8.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="266" src="http://2.bp.blogspot.com/-_jrh3sBitIQ/VUutelHIyLI/AAAAAAAAEN0/76h3FZlno7Y/s400/gay-talese-and-what-makes-a-man-8.jpg" width="400" /></a></div>
<div style="margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="color: #222222;"><span style="font-family: Georgia;"><br /></span></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-22980624212200531552015-03-26T15:10:00.002-03:002015-03-26T15:12:00.537-03:00Ligas mayores*<br />
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif;"><br /></span></div>
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif;">Los
estadounidenses se empeñaron en llevar el
béisbol más allá de las fronteras de nuestra galaxia. Por momentos
parecía que era lo único que les interesaba. Soñaban con ver a los
otros seres del Universo con <i>caps</i>
y <i>hotdogs</i> en las
tribunas, y las ligas mayores con equipos foráneos (como una forma
de modernizarla y adaptarla a los nuevos tiempos). Ni que hablar de
la tanda publicitaria en los partidos que se transmitirían vía
satélite: una cosa es que te vean en la otra costa del país, ¡y
otra cosa es que te vean en la otra punta de la vía láctea!</span></div>
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif;">Se
organizaron bien. Cientos de voluntarios fueron
preparados para invadir los planetas con vida inteligente e
instruirlos en el deporte. Improvisaban las canchas, mostraban
películas de jugadas memorables, repartían <i>caps</i>
y camisetas de diferentes equipos, los Boston Red Sox, los
Philadelphia Phillies, los New York Mets, los New York Yankees, los
Chicago Cubs, los Pitsburgh Pirates, y narraban con entusiasmo las
hazañas de Babe Ruth, Hank Greenberg, Mickey Mantle y Joe DiMaggio.
Lo más difícil era explicar las reglas. Una vez entendidas las
reglas lo más difícil era contagiar la pasión por el deporte.
Cientos de voluntarios volvían a la Tierra frustrados, rojos de ira,
heridos, y más nacionalistas que nunca. No podían entender cómo
podían fallar en tantos planetas, cómo era tan difícil hacerles
entender lo apasionante que era el béisbol. No podían soportar ver
a los seres extraños parados en la base sin saber qué hacer, viendo
pasar la pelota por el costado, o si lograban batear, ya habían
olvidado el paso siguiente. </span>
</div>
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif;">Para
el béisbol la conquista del espacio fue todo un
fracaso. Las canchas que quedaron desperdigadas terminaron teniendo
diferentes usos: en algunos lugares lo juegan cada tanto según lo
entendieron; en otros las preservan como un recuerdo de aquellos
extraterrestres entusiastas y sonrientes que un día se fueron sin
dejar rastros, y en otros simplemente las tapó el polvo y la arena.</span></div>
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif;"><span style="font-size: small;"><br /></span></span></div>
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif; font-size: x-small;"><br /></span></div>
<div align="JUSTIFY" style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<span style="font-family: Georgia, serif;">*De "Guía para un universo", 2004.</span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-82727101940949514272015-03-16T14:11:00.003-03:002015-03-16T14:11:50.183-03:00Gato en el ropero y otros haikus<br />
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif;">
<b><span style="font-family: Georgia;"><br /></span></b></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: 13px;">
<span style="font-family: Georgia;"> </span><span style="font-family: Georgia;"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: 13px; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11pt;">Estos <span class="il">haikus</span> poco tienen que ver con Japón. Al menos en el contenido. Por curiosidad tomé la estructura de 5-7-5 sílabas y la usé a mi gusto. Decidí contar lo que pasaba en ese momento particular de mi vida. El resultado son textos que hablan de la playa, de gatos, de amor, de la infancia, de personajes que admiro. Pero también quería hacer un libro que diera gusto tocar, mirar, oler, volver a leer. Por eso me di el gusto de contar con las hermosas ilustraciones de Adela Casacuberta y las <span class="il">fotos</span> de Bernadette Laitano. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: 13px; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: 13px; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11pt;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://3.bp.blogspot.com/-cA09Ci8Gcdg/VQcON0M73LI/AAAAAAAAD9U/D88gf5NRfEk/s1600/tapa.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://3.bp.blogspot.com/-cA09Ci8Gcdg/VQcON0M73LI/AAAAAAAAD9U/D88gf5NRfEk/s1600/tapa.jpg" height="400" width="258" /></a></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://3.bp.blogspot.com/-OaYQzF6Lqag/VQcOKUCPRUI/AAAAAAAAD9E/HLWWGExvc8c/s1600/haikus%2Bcaptura%2B3.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://3.bp.blogspot.com/-OaYQzF6Lqag/VQcOKUCPRUI/AAAAAAAAD9E/HLWWGExvc8c/s1600/haikus%2Bcaptura%2B3.jpg" height="332" width="400" /></a></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://1.bp.blogspot.com/-ARmocvUIZ24/VQcOKp9VAmI/AAAAAAAAD9A/dRX2pUDOqZ4/s1600/haikus%2Bcaptura%2B2.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://1.bp.blogspot.com/-ARmocvUIZ24/VQcOKp9VAmI/AAAAAAAAD9A/dRX2pUDOqZ4/s1600/haikus%2Bcaptura%2B2.jpg" height="311" width="400" /></a></div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://1.bp.blogspot.com/-bjhwlO9W14s/VQcOKWfk7GI/AAAAAAAAD88/HLrpWoVXpBo/s1600/haikus%2Bcaptura%2B1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://1.bp.blogspot.com/-bjhwlO9W14s/VQcOKWfk7GI/AAAAAAAAD88/HLrpWoVXpBo/s1600/haikus%2Bcaptura%2B1.jpg" height="321" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="background-color: white; color: #222222; font-family: arial, sans-serif; font-size: 13px; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11pt;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-68140323327227532042015-03-13T13:38:00.001-03:002015-04-06T12:02:02.780-03:00Reflexiones sobre un tal Julio*<br />
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://2.bp.blogspot.com/--2DFu0HGEyk/VQb8EtpC_MI/AAAAAAAAD74/KeyZHOGqaTI/s1600/cortazar.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://2.bp.blogspot.com/--2DFu0HGEyk/VQb8EtpC_MI/AAAAAAAAD74/KeyZHOGqaTI/s1600/cortazar.jpg" /></a></div>
<br /></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: right;">
<br /></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: right;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Hay escritores que
ofician de señuelos. Su misión es atrapar a los lectores más
huidizos, los que leen solo en verano e incluso a esos que no tienen
ni una pequeña biblioteca. Estos escritores tienen colores
brillantes y plumas, te miran con ojos grandes y entusiastas,
invitándote a hincarles el diente. Ellos abren la puerta, nos
tientan con la posibilidad de ingresar definitivamente a un mundo que
difícilmente abandonemos mientras estemos vivos. Esos escritores no
son siempre los mismos. Pueden variar de persona a persona. Hay
quienes se verán en un principio atraídos por los colores de H.P.
Lovecraft, otros por Edgar Allan Poe, algunos por Jorge Luis Borges,
o Paul Auster, o Agatha Christie, o Ray Bradbury o incluso Corín
Tellado. Pero hay escritores que tienen record olímpico en esto de
iniciarnos en masa, en esa tarea casi siempre sin intención de
atraparnos fuertemente y tirar de la tanza. ¿Cabe alguna duda de que
Julio Cortázar es uno de ellos?
</span></div>
<div style="background-color: white; line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="background: #ffffff; line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Un
día descubrí que dos de mis personajes literarios favoritos se
parecían mucho entre sí: la Maga de <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>
y Holly Golightly de <span style="font-size: small;"><i>Desayuno
en Tiffany's</i></span>.
Frágiles, tiernas, desordenadas, llenas de secretos, amigas de los
gatos, estas dos chicas se mueven por París y Nueva York con tanta
frescura,
arrojo e inocencia en sus ojos que la frialdad de la ciudad no puede
doblegarlas. Nunca me cayó muy bien Horacio de <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>.
Está tan ensimismado en sus ideas y en sí mismo que es incapaz de
mostrarle a la Maga un poco de compasión cuando ella realmente lo
necesita. En cambio, en Nueva York, el escritor se siente intrigado
por Holly, se desvive por comprenderla y desentrañar sus
misterios. Truman Capote lanzó <span style="font-size: small;"><i>Desayuno
en Tiffany's</i></span>
en 1958; <span style="font-size: small;"><i>Rayuela
</i></span>es
de 1963. No me parece casual, o al menos es un dato curioso, que haya
solo cinco años entre estos dos personajes entrañables.
</span></div>
<div style="background-color: white; line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="background: #ffffff; line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Los
libros son pacientes. Ellos te esperan, no importa cuánto tiempo
deban hacerlo. Yo dibujaba con crayolas sobre el piso vinílico y
ellos me miraban desde la biblioteca de mis padres. Ahí estaba todo
el boom latinoamericano esperando por mí: Mario Vargas Llosa, Carlos
Fuentes, Gabriel García Márquez. También estaba el Montevideo más
triste y extraño con Juan Carlos Onetti y Felisberto Hernández, la
fecunda generación del 45 y otras joyas clásicas como Gustave
Flaubert y Honoré de Balzac. Años más tarde también me adentraría
en las fiestas y los pasteles de crema de Katherine Mansfield, en las
mujeres exuberantes de Jorge Amado y en las historias cotidianas con
giros fantásticos de Julio, que me dejaban atónita, fascinada, y
que me provocaron los primeros impulsos por la escritura.
</span></div>
<div style="background: #ffffff; line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pero
en mi infancia no sospechaba todo lo que podían contener aquellas
páginas. Sabía que eran objetos preciados, que aunque estuvieran
viejos se les ponía un forro de nylon y se les acomodaba la solapa
con cinta adhesiva para que no se desarmaran. Estaban ahí,
inevitables para la vista ocupando toda una pared, pero yo todavía
los atisbaba como algo aburrido: no tenían ilustraciones, tenían
muchas palabras difíciles. Prefería mis revistas de Archie o
Mafalda.</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Los libros que se
acumulan, todos los volúmenes que una quisiera leer y los años que
no alcanzan. Vivo con una ansiedad permanente por el paso del tiempo,
por lo corta que es la vida en relación a tantas páginas que
quisiera devorar. Julio lo explica muy bien en <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>,
y de paso calma un poco mi angustia: “Realmente no me aflige gran
cosa no haber leído todo Jouhandeau, a lo sumo la melancolía de una
vida demasiado corta para tantas bibliotecas, etc. La falta de
experiencia es inevitable, si leo a Joyce estoy sacrificando
automáticamente otro libro y viceversa, etc<span style="font-size: small;"><i>.</i></span>”<span style="font-size: small;"><i>
</i></span>La
falta de experiencia es inevitable. Quiero tatuarme esa frase en la
cabeza. Y de paso elegir con mucho cuidado el siguiente libro que voy
a tomar.</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando Julio pasaba
por Montevideo se quedaba en el Cervantes, un hotel céntrico que
solía ser tranquilo y misterioso, y en el que se hospedaron Adolfo
Bioy Casares y Borges. Tanto Bioy como Cortázar eligieron el hotel
como escenario y protagonista de dos de sus cuentos, de argumentos
similares: “Un viaje” y “La puerta condenada”. Este último
es uno de mis favoritos de Julio: una clase magistral de cómo
envolver y arrastrar al lector al desenlace sin una sola palabra de
más. Es magnífico en la descripción de ambientes, personajes,
sonidos y estados de ánimos. Perturbador hasta quitar el aliento, es
ideal si se buscan emociones intensas en una noche de soledad y
tormenta. Apuesto que más de uno dejó la luz prendida después de
leerlo.
</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Si pudiera hacerme
del DeLorean de <span style="font-size: small;"><i>Back
to the future</i></span>
aprovecharía para viajar a los cafés de Saint-Germain des Près de
París para ser testigo de esas tertulias interminables entre los
artistas e intelectuales más efervescentes del siglo veinte. Simone
de Beauvoir, Jean Paul Sartre, Marguerite Duras, Ernest Hemingway y
André Breton en el Café de Flore; Pablo Picasso, Albert Camus y
Julio en Les Deux Magots. Meterme ahí, entre el humo, los vasos y
las botellas y simplemente observarlos y escuchar. Para esta gente el
frío, la ropa raída o las pocas monedas en el bolsillo no empañaban
la sed insaciable de ideas filosóficas y literarias revolucionarias
que poco más tarde transformarían el mundo. Finalmente, caminaría
una tarde junto a Julio por el barrio Latino, él altísimo, con sus
manos en los bolsillos del gamulán, y yo diminuta, mirando hacia
arriba y escuchándolo con atención. Él prendería un cigarrillo y
me señalaría personajes, y enseguida hablaría de ellos con ese
acento tan <span style="font-size: small;"><i>de
la gorge, </i></span>encantador<span style="font-size: small;"><i>
</i></span>y
propiamente suyo. Al caer el sol estaríamos repartiendo volantes en
las calles del mayo francés; yo me dejaría contagiar por esa
romántica y pasional quimera de que construir otro mundo es posible.</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">
“¿Los detectives
salvajes es la <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>
de nuestra generación?” le preguntaron a Roberto Bolaño poco
antes de morir. Él contestó: “Mi novela es una pobre novela
comparada con <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>”.
Claro que no es cierto. <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>
marcó la cancha, rompió estructuras, influenció a muchos que
vinieron después, incluso a Bolaño a la hora de escribir ese libro
magnífico que también supo marcarnos. Todos deberíamos tener en la
juventud un encuentro con <span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span>
como manual para la vida. Alguien debería hacerlo, pasar la posta,
abrirnos los ojos, advertirnos: “tome, usted casi es un adulto, lea
esto y luego vuele”.</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">A los veinte años
pensaba que <span style="font-size: small;"><i>Historias
de cronopios y de famas</i></span>
era cosa de hippies. Yo escuchaba a The Clash y odiaba a los
hippies. Con ese libro sentí que Cortázar me había decepcionado,
lo sentí como el amigo rockero y virtuoso que un día decide hacer
baladas pop para salir en el top ten de la radio. Así que me hice la
distraída y lo tomé como un simple tropiezo en su rica carrera
literaria. Él podía permitirse eso, textos que se imprimían en
artesanías y en fotocopias que se entregaban en el ómnibus a cambio
de alguna moneda. Luego de varios años, y volviendo a releer esas
historias, pienso que la que tenía un problema era yo, un deseo
profundo de ser cronopio y un fama interior que no me dejaba en paz.
Además, quién puede enojarse con un libro que tiene una frase como
esta: “En un pueblo de Escocia venden libros con una página en
blanco perdida en algún lugar del volumen. Si un lector desemboca en
esa página al dar las tres de la tarde, muere”.</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: center;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">*</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El hombre con ojos
de gato, ese era Cortázar para mí incluso antes de leerlo. Al ver
su fotografía en la solapa de los libros, sus ojos separados y
claros me atravesaban. Pero no era una mirada perturbada o cínica.
Eran los ojos de un gato que descansa en tu regazo y ronronea entre
alerta y divertido. Julio era un amante de los gatos, como yo. Las
fotos con su gata Flanelle son una delicia. En ellas sus 1.95 metros
se ponen a la altura de la pequeña criatura, él la mima con sus
manazas, juega, se olvida del fotógrafo. Varios de sus textos tienen
gatos, y él sabe captarlos con un amor y comprensión solo
comparable a la pluma de Colette. Más que el “cronopio mayor”,
para mí él es un gato disfrazado de Cortázar:</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 2.5cm; text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">“[…]
los gitanos y los traductores internacionales no tienen gatos, un
gato es territorio fijo, límite armonioso; un gato no viaja, su
órbita es lenta y pequeña, va de una mata a una silla, de un zaguán
a un cantero de pensamientos; su dibujo es pausado como el de
Matisse, gato de la pintura, jamás Jackson Pollock o Appell […]”
(<span style="font-size: small;"><i>Último
Round</i></span>).
</span></div>
<div style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 2.5cm; text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 1.25cm; text-align: left; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">
“Todo aquí es tan
libre, tan posible, tan gato” (<span style="font-size: small;"><i>Salvo
el crepúsculo</i></span>).</span></div>
<div style="line-height: 100%; margin-bottom: 0cm; margin-left: 2.5cm; text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">“[…]
y los gatos, siempre inevitablemente los minouche morrongos miaumiau
kitten kat chat cat gatto grises y blancos y negros y de albañal,
dueños del tiempo <span style="color: black;">y
de las baldosas tibias, invariables amigos de la Maga que sabía
hacerles cosquillas en la barriga y les hablaba un lenguaje entre
tonto y misterioso, con citas a plazo fijo, consejos y advertencias”
(</span><span style="color: black;"><span style="font-size: small;"><i>Rayuela</i></span></span><span style="color: black;">).</span></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><a href="https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=10214311" name="_GoBack"></a>
Julio fue uno de los
pocos que me mostró que el humor puede ser parte de la literatura. O
mejor aún: que el humor es fundamental en la literatura. Que se
pueden usar palabras locas, comunes, lunfardas, localistas,
combinadas sin prurito con un poco de buen francés. Que no hay que
ser tan ceremonioso, que escribir era como jugar. Que invitar al
lector a ese juego no te hace menos intelectual o menos valioso que
un escritor acartonado y sumido en sus pesares. Julio no envejece en
ninguna estantería, es el eterno muchacho, el niño alto, ocurrente
y enamorado; una delicada mezcla de felino, Peter Pan y Dorian Gray.
</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;">*Del libro "Cortázar sampleado", 2014.</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="background-color: white; line-height: 200%; text-indent: 1.25cm;"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;"><a href="http://tienda.librosampleados.mx/index.php/publicaciones/impresas/cortazar-sampleado-19.html" style="color: #1155cc;" target="_blank">http://tiendalibrosampleados.mx/index.phppublicaciones/impresas<span class="il">cortazar</span>-<span class="il">sampleado</span>-19.html</a></span></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-indent: 1.25cm;">
<span style="font-family: Times New Roman, serif;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-46319062215464538002015-01-08T14:25:00.003-02:002015-03-13T12:50:10.098-03:00Cordón Soho (2014) Cap.1<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://3.bp.blogspot.com/-HBfNB4x1U30/VK6tJ2yVUmI/AAAAAAAADjE/N3DmChPccmE/s1600/unnamed.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://3.bp.blogspot.com/-HBfNB4x1U30/VK6tJ2yVUmI/AAAAAAAADjE/N3DmChPccmE/s1600/unnamed.jpg" height="400" width="260" /></a></div>
<br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">1.</span><br />
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Se despertó y la resaca fue todo lo que sintió. Se desperezó, salió de la cama, se calzó las pantuflas y levantó la persiana para dejar entrar el sol. Apretó fuerte los párpados y se concentró en el dolor de cabeza que le empezaba en la nuca y le terminaba entre medio de los ojos. Fue a la cocina haciéndose masajes en la base de la nariz y en el pasillo chequeó que el cuarto de Tati estuviera vacío.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Continuó y en el camino se topó con los restos de la fiesta de la noche anterior. Con desgano se preparó un café con leche, lo empinó de pie apoyada contra la mesada y cuando terminó se dispuso a arreglar el desastre. Abrió la ventana del living para sacar el olor a cigarrillo, vació los ceniceros, lavó los vasos, embolsó las botellas, lavó la licuadora, roció Blem sobre los muebles, sacudió la tela de los sillones, barrió y pasó un trapo húmedo y jabonoso por todo el piso.</span></div>
<div style="text-align: left;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"> Los recuerdos le venían borrosos, en oleadas. Había sido una noche movida, con amigos suyos y de Tati yalguna que otra cara nueva que no se sabía muy bien cómo había llegado ahí. Ella había empezado a disfrutar la velada al segundo mojito, cuando dejó de importarle si los invitados usaban posavasos o si entraban con los pies sucios. Conectó la Mac a los parlantes, abrió el Virtual Dj y se encargó de ambientar la reunión, lo que resultó en un éxito en la pista de baile (el espacio </span><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">de living que quedaba una vez que se corría la mesa de café y el sillón). Bailaron desde Abba hasta los Yeah Yeah Yeahs, desde Erasure hasta The Sex Pistols, desde Lady Gaga hasta Rafaela Carrá. Las botellas vacías no dejaban de acumularse en la cocina, alguien fue a comprar hielo a la estación de servicio, los mojitos fueron lo mejor que se le ocurrió a Tati, que no dejó de machacar menta toda</span></div>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">la primera mitad de la noche. El cogollo llegaba en cantidades industriales y hasta hubo dos o tres que se dieron un saquecito en el baño. No faltó nadie. Pasadas las tres de la mañana incluso llegó el gordo Gizmo con dos amigos. Tati le había mandado un mensaje cuando él estaba en el bar, y para no cortarse solo invitó a sus amigos y enfilaron a pie las diez cuadras que los separaban del viejo </span><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">apartamento. Valentina en seguida puso los ojos sobre la chica que llegó con él. Una morocha de ojos negros y cerquillo que le llamó la atención. Al otro chico ya lo conocía, era Miguel, un egresado de la escuela de cine, menudo y raído, al que dos por tres se encontraban en Cinemateca y se les pegaba como chinche.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Gizmo era más que nada amigo de Tati, y esa para Valentina era una amistad difícil de explicar. Era artista plástico, músico semifrustrado, o dicho de otro modo, un dealer a tiempo completo. Tenía más de cuarenta años y se rodeaba de la crema juvenil y roquera del momento. Le decían Gizmo porque era redondo y de ojos grandes, pero si lo tocaba una gota de agua seguramente se convertiría en un gremlin furioso. Deambulaba entre la gente con el vaso en la mano, como un dandi arrogante y venido a menos. Hasta que alguien le daba charla, y si el interlocutor demostraba tener un mínimo de nivel cultural, sacaba a relucir su lado erudito y sensible.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">La chica, que rápidamente averiguó se llamaba Carolina, no dejó de bailar en toda la noche. Valentina chequeó qué música era la que la activaba más y empezó a organizar el set según su lenguaje corporal. Los puntos altos de entusiasmo fueron con Daft Punk, Billy Idol, Cassius, Madonna y Chuck Berry. La estrategia funcionó porque se le acercó varias veces para celebrarle la selección, hasta que la tomó de la mano y la sacó del puesto de dj para bailar.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuando terminó de limpiar, se duchó y se apuró para llegar a tiempo al almuerzo familiar. Los domingos eran los días para volver al caparazón, para recuperarse del fin de semana, para dejarse mimar por sus padres y luego volver a casa, andar por el viejo apartamentito en pijama sin que nadie la molestara. Tati casi nunca estaba los domingos, trabajaba o se iba a pasar el día a la casa de su madre en Sayago y no volvía hasta la noche. Una vez de regreso y si hacía menos de quince grados, Valentina </span><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">prendía la estufa a gas, abría el Illustrator en la computadora y se ponía a trabajar. Le ponía “reproducir” a una carpeta que justamente se llamaba “Domingo” y que contenía canciones de The Nacional, The head and the heart, She and Him o Fiona Apple. Todo era más que perfecto cuando había en la casa una barra de chocolate y suficiente café para poner en el fuego.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br /></span>
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Faltaba poco para el amanecer y recurrió a la carpeta “Tranqui”. Los pocos que quedaban en el apartamento mutaban en el suelo o en el sillón, hablaban una media lengua que destilaba alcohol y nicotina. Se recostó contra una pared y encendió un cigarrillo. Carolina se le unió y le pidió fuego. Tenía el cerquillo hacia el costado y el rímel un poco fuera de lugar, como en una imagen en 3D vista sin lentes, lo que para Valentina la hacía verse más real e interesante. Hablaron sobre música, libros </span><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">y cine. Se rozaron, apoyaron la cabeza en el hombro de la otra, se sonrieron sin motivo, estuvieron de acuerdo en que deberían ver juntas Mulholland Drive y compartieron un último vaso de cerveza casi tibia. Gizmo se levantó del sofá para ir a servirse agua a la cocina. Cuando pasó junto a ellas no las miró, pero dijo por lo bajo: “yo sé lo que está pasando”, y continuó su camino. Carolina bajó los párpados e hizo una mueca con la boca; luego buscó el teléfono en el bolsillo de su campera de cuero.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Chequeó mensajes mientras Valentina se terminaba la cerveza y pensaba cómo iba a terminar la noche.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">—Me tengo que ir.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">—¿Ya?</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">—Sí... ¿“Ya” decís? Está saliendo el sol —y se rio con</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">una risa ronca.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">—Por eso. Quedate.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">—No puedo... —y la miró con lástima, o con culpa. Valentina no supo bien.</span><br />
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Bajo la luz fría del viejo ascensor parecía que el hechizo se había cortado. Intercambiaron miradas en el espejo y bostezaron casi a la vez. Luego se rieron, y en la planta baja el frío las invitó a abrazarse y despedirse, un beso en la mejilla y otro fugaz en la boca y Carolina desapareció tan rápido como había llegado.</span>Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-60873178930885939622015-01-08T14:03:00.000-02:002015-03-16T12:55:42.581-03:00El planeta de los charcos<br />
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://4.bp.blogspot.com/-X2FAmr3k13M/VQb88Euo3GI/AAAAAAAAD8A/p_f2xJHMQEY/s1600/guiaparauniverso-g.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://4.bp.blogspot.com/-X2FAmr3k13M/VQb88Euo3GI/AAAAAAAAD8A/p_f2xJHMQEY/s1600/guiaparauniverso-g.jpg" /></a></div>
<br /></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><br />
</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Pisaron
la tierra nueva con desgano. Estaban hartos de llegar a planetas sin
vida inteligente. Este, sin embargo, tenía algo
que lo hacía diferente: el suelo estaba cubierto con charcos de
diversos tamaños, acá y allá, más grandes, más chicos. También
había algunas elevaciones, y una hierba corta y muy verde. El cielo
era de un celeste intenso, como en las mejores épocas de la Tierra,
pero cerca del suelo correteaba una bruma que se hacía por momentos
más densa. Había que admitirlo: no había evidencia de vida
humanoide o animal, pero tenía cierto encanto que lo diferenciaba
del resto. El aire era puro, las pruebas de tierra y agua no
detectaron elementos tóxicos, así que se abrieron los trajes
espaciales, se quitaron las pesadas botas, y se recostaron sobre la
hierba a disfrutar del sol. Era un momento de distensión para la
tripulación brasileña, por lo tanto el capitán permitió que se
improvisara un picnic con <i>feijoada</i>
y cerveza incluidas. Bebieron y comieron hasta el cansancio, pero
también hubo tiempo para poner un poco de música y bailar hasta
quitarse lo poco que quedaba de los trajes espaciales. De la hierba
que pisotearon durante horas quedaba poco, y ya se veían lamparones
de tierra en la zona de baile. El capitán, feliz de conquistar el
respeto de su tripulación con tremendas libertades, se echó en el
suelo a descansar, de costado. El cansancio y la digestión
comenzaban a transportarlo a un mundo de somnolencia y confusión.
Eso quiso decirse a sí mismo cuando con la cara contra el suelo
comenzó a ver cuerpitos humanos con no más de cinco milímetros de
alto. Correteaban despavoridos, se escondían debajo de la espesa
hierba… ¡bosques! ¡Esa no era hierba! ¡Eran árboles! ¡Bosques
diminutos que desde arriba parecían hierba! Y más allá casitas,
construcciones que había confundido con piedritas. Quiso vomitar.
Vio a sus subalternos saltando y bailando, vio sus pies golpeando el
suelo, y se desmayó.
</span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">El daño
que los brasileños provocaron a aquella tierra fue incalculable.
Vistos con lupa, los habitantes de aquel planeta no diferían mucho
del nuestro, sólo que eran considerablemente más pequeños. En la
Tierra la noticia despertó diversas reacciones. Algunos creían que
por su tamaño, estos “pequeños humanos” como se los llamó en
la prensa, no tenían demasiado valor. Otros se escandalizaron; no
podían creer semejante masacre. Pronto comenzaron las hipótesis de
qué pasaría si a la Tierra bajaran botas gigantescas que nos
aplastaran. Hoy las visitas al planeta de los charcos no están
permitidas por razones obvias. Los brasileños nunca supieron cómo
resarcirse. Para algunos es suficiente con dejar al planeta en paz,
sin la visita de los grandes humanos. </span>
</div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: small;"><br /></span></div>
<div style="line-height: 200%; margin-bottom: 0cm; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif; font-size: x-small;">*De <b>Guía para un universo</b></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-40054403735211174162013-10-16T22:18:00.001-02:002015-01-08T14:14:40.940-02:00El chalecito*<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La primera vez que lo vi fue en mi noveno
cumpleaños. Jugábamos a la mancha bajo la parra del patio y, al voltear hacia
la puerta del fondo lo vi de pie, apoyado elegantemente contra el marco y con
las manos en los bolsillos. Llevaba un traje claro, de verano, una corbata
verde oliva y el pelo desordenado. Nos miraba como pensando en otra cosa, hasta
que posó fuertemente sus ojos en mí como si quisiera decirme algo. Desconocía a
aquel hombre, pero al ser mi cumpleaños no era extraño ver una cara diferente
en casa. Podía ser un compañero del taller de papá o quizás un empleado de la
confitería donde mi madre era cajera. ¿Y si era uno de esos pasteleros que
hicieron con tanto esmero mi torta de cumpleaños? Su presencia no me quitó el
sueño, y menos en medio del juego. Corrí hacia el otro lado del patio, eludí un
brazo extendido, y cuando volví a mirar hacia la puerta, el hombre ya no
estaba. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A la hora de soplar las velas de la torta
todos rodearon la mesa del comedor; las caritas que apenas sobrepasaban al
mantel miraban con ansiedad cómo mi padre encendía las mechas con un
encendedor. Niños y adultos se pusieron a cantar lentamente, extendiendo las
sílabas como si alguien comenzara a darles manija, y en ese momento creí verlo
al fondo, junto a la tía Lidia, levantando la cabeza y buscando la escena,
mientras el resto alzaba la voz ya a buen ritmo y con una energía desmesurada.
El silencio que siguió al canto me hizo volver a mi momento especial, pedí tres
deseos y soplé con fuerza.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">En el desayuno, mientras comíamos los
restos de la torta, les pregunté a mis padres por el extraño. En mi plato
temblaba un trozo de bizcochuelo decorado con las últimas letras de mi nombre. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Qué señor decís?- preguntó mi madre con
la boca llena.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Ese, de traje y corbata verde.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ambos intercambiaron miradas. Mi padre
frunció el ceño.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Estás segura? No vino nadie de traje-
sentenció él. –No conozco a nadie que use traje.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mi madre largó una risita y un pedacito
de bizcochuelo, que fue a dar al mantel de hule. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Capaz que era el príncipe de la
Blancanieves de la torta- dijo tentada, y le hizo una guiñada a mi padre.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ese hombre no era un príncipe, pero
preferí no decir nada. Tenía más pinta de joven inmortalizado en una foto
antigua, como esas que guardaba la abuela en el primer cajón de la cómoda.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Un par de meses después de mi cumpleaños
la casa era un caos. Las cajas de mudanza entorpecían el camino en todas las
habitaciones, que no eran muchas. Nos íbamos a vivir con la tía Lidia porque
otro hermano de mi madre había pedido su parte de la casa, que había sido de
mis abuelos. Mis padres sabían que ese momento podía llegar, pero ahora
deambulaban por nuestro hogar perdido como si se hubiese muerto alguien. A mí
me entusiasmaba la idea de mudarme. La casa de la tía Lidia era linda, de
ladrillo a la vista y tejas rojas. Una especie de chalet en miniatura. Me
encantaba su colección de animalitos de cerámica, que me dejaba admirar y sacar
del aparador del comedor si prometía limpiarlos uno por uno con un paño húmedo.
La cuestión es que andábamos en plena limpieza y transporte de las cajas. Los
peones del camión entraban y salían decididos, levantaban las cosas sin preguntar nada, y parecía increíble que
nuestras pertenencias, estáticas durante tanto tiempo, pudieran irse tan rápido.
Mi madre y mi tía hablaban en la cocina mientras guardaban las últimas ollas y
sartenes. Lidia trataba de convencerla de no llevar las cacerolas más
abolladas, porque ella tenía unas más nuevitas, con teflón para que no se
pegaran los fideos. Yo fui al patio a ver si me había dejado algún juguete
tirado en el parrillero o en el galpón de papá. Al pasar por la entrada de
autos, al costado de la casa, vi a un hombre parado en la vereda, del otro lado
del portón. Miraba intrigado cómo los peones se pasaban las cajas mientras daba
unas pitadas cortas a su cigarrillo. Enseguida salí disparada hacia la cocina,
porque lo había reconocido. Era el de traje, el de mi cumpleaños, no cabía
duda. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Mamá, ¡está el hombre del traje, en la
vereda!<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Qué decís, Mili?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-El hombre de traje que vino a mi
cumpleaños. Está en el portón, ¡vení a verlo!<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mi tía me miró torcido.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Qué le pasa a esta nena, Carmen?- le
preguntó a mi madre, como si yo no estuviera presente.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Anda viendo hombres de traje por todos
lados. En este barrio, ¡imaginate!<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Es buen mozo?- preguntó Lidia con los
ojos chisporroteantes y retorciendo un repasador- ¡Capaz que es un buen
candidato para la tía, Mili! <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La tironeé del repasador y la arrastré
hacia la puerta del fondo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¡Vení vos a verlo, entonces!<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Una vez en el pasillo, le señalé la
calle. El hombre miró hacia nosotras, bajó la cabeza y salió disparado.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Lo viste, tía? ¿Tenía traje o no?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La tía me agarró fuerte de la mano y me
arrastró de nuevo a la cocina.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Vamos, nena. No vamos a mirar a la gente
que pasa por la calle con todo lo que tenemos que hacer.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">En la casa de la tía dejé de tener cuarto
propio. Dormía con ella en una habitación del fondo con dos camas viejas de
respaldos de madera oscura y adornos retorcidos. A ella no parecía molestarle
el hecho de haber cedido su cuarto a mis padres y dormir conmigo en un espacio
que antes había sido su cuartito de costura. Por el contrario, creo que lo
disfrutaba un poco. Cuando apagaba la luz de la portátil nos quedábamos boca
arriba, charlando sobre la vida y viendo con ojos soñadores las paredes
pintadas con la luz que se filtraba por las persianas. Yo sentía que esos
momentos de intimidad eran propicios para hablar cosas importantes. Le
preguntaba por su infancia, por los abuelos, y hasta por qué se estaba
recalentando el planeta. Ella suspiraba antes de responder, procesaba mis
preguntas con placer. Creo que cuando se apagaba la luz jugábamos un poco, yo a
ser inquisidora y profunda, y ella a contestarme como si fuese una estrella de
cine en una entrevista. Una noche le pregunté por qué nunca se había vuelto a
casar. Acá más que un suspiro largó una bocanada áspera y densa.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Ay, Mili, son cosas complicadas esas…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Complicadas por qué?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-No es tan fácil a mi edad… Además estoy
muy bien sola. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿No te aburrís?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-No, qué me voy a aburrir. Y ahora con
ustedes acá menos me voy a aburrir.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Escuché cómo se movía en la cama y se
daba vuelta hacia la pared.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Dormite, Mili. Que mañana tenés escuela.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Las primeras semanas la vida familiar fue
desarrollándose en armonía. Mirábamos la tele todos juntos en el comedor, la
tía se reía de los chistes de papá, mamá no dejaba que nadie lavara los platos,
y yo limpiaba los adornitos de cerámica una vez por semana. Ya nadie extrañaba
la vieja casa; habíamos encontrado nuestro lugar en el chalecito sin sentirnos
de prestado o sapos de otro pozo. La que empezó gradualmente a perder su
vitalidad y su risa fácil fue la tía. Deambulaba por la casa buscando rincones
serenos. Evitaba nuestra compañía en las noches y lloriqueaba cuando se pinchaba
la yema del dedo con una aguja. Mi madre estaba preocupada, le preguntaba cosas
en susurros, pero no podía sacar nada en claro. Mi padre la tranquilizaba
diciéndole que debía estar en “ese momento de las mujeres”, que sería una
cuestión de falta de hormonas. Pero mi madre no se convencía. Presentía que
había algo que mi tía no revelaba, y estaba dispuesta a averiguarlo. En mi
caso, que compartía la habitación con Lidia en las noches, noté el cambio
aunque ella se esforzara por que no fuera así. Sus respuestas a mis preguntas
eran menos elaboradas, y se excusaba diciendo que estaba cansada. Pero se movía
mucho en la cama y le costaba dormirse. Algunas veces la escuchaba sonarse la
nariz, pero si le preguntaba, me decía que tenía alergia al polvo de la
alfombra. Para animarla le hice un dibujo. Lo pinté con los marcadores nuevos
que me habían regalado en mi cumpleaños y que todavía no había usado. Me esmeré
retratando a la familia: mamá, papá, la tía, yo, y el chalet de fondo. Estaba
orgullosa de mi obra, de los colores que no sobresalían los bordes de las
figuras, y se lo entregué en la cocina, delante de todos. Ella lo tomó, lo
recorrió con sus ojos, y se puso a llorar. Se cubrió el pecho con mi obra y se fue al baño al trotecito. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Cuando llegó el verano las tardes se me
hacían largas y aburridas. La tía bajaba la persiana del cuarto y dormía “la
siestita del burro”, como decía ella. A mi me daban una pila de revistas de
Isidoro Cañones que había sido de papá y pretendían que hiciera lo mismo. Pero
me conocía las historias de memoria y tampoco quería dormir. En una de esas
siestas me puse inquieta. Desde el colchón apoyé los pies descalzos sobre la
pared para ver cuántos pasos podía dar hasta extender las piernas totalmente.
Luego, cuando dejó de ser divertido, me colgué cabeza abajo, apoyé las manos
sobre las baldosas frías y vi una caja de zapatos debajo de la otra cama. La
traje hacia mí muy despacio para no despertar a Lidia, y la abrí. Aparecieron
cartas viejas, estampitas de santos y algunas fotos. Casi me llevo la sorpresa
de mi vida cuando en una de esas imágenes descubrí al hombre de traje, que no
estaba de traje, sino con una camisa blanca inmaculada y una sonrisa resplandeciente.
Del lado de atrás alguien había escrito: “Piriápolis. Semana Santa”. Apreté la
foto contra el elástico de mis shorts, cerré la caja y volví a dejarla en su
lugar. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A la hora de la merienda, mientras la tía
había ido a la panadería, saqué la foto para mostrársela a mamá. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿De dónde sacaste esto?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-De una caja. Es el hombre de traje,
¿ves? ¡No eran inventos míos! <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Dame eso- dijo arrancándome la foto de
mi mano. -Qué tenés que andar revisando las cosas de tu tía. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Pero…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Andá al frente a jugar, salí de mi vista
antes que me enoje, Mili.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Pero qué vas a hacer…?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Milagros… Cuento hasta tres y no te
quiero ver acá. Uno… dos…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Una tarde de domingo mis padres llevaron
las sillas de playa al jardincito del frente. Se instalaron para tomar mate y comer
rosca con chicharrones. La tía podaba en silencio las rosas con una vieja tijera
de jardín. Yo andaba en bicicleta por la vereda, yendo de esquina a esquina una
y otra vez. Mientras me imaginaba que montaba una moto inmensa y daba la vuelta
en la puerta del almacén, vi a lo lejos un hombre parado frente al chalecito.
Miraba hacia adentro y parecía que hablaba con alguien, sin sacar las manos de
los bolsillos. Apuré las pedaleadas para saber de qué se trataba. Cuando estaba
a pocos metros me di cuenta. No sabía si
detenerme o seguir de largo, pero mi curiosidad fue más fuerte. Me quedé junto
al árbol, a una distancia prudencial, mirando su espalda. La cara de la tía
parecía que había visto un fantasma. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Qué hacés acá?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Lidia… Pensé que…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mi padre se paró. Se quedó ahí, como en
guardia, sacando pecho, sin remera y en chancletas. Mi madre seguía la escena sin dejar de masticar en cámara lenta.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-No tenés que venir acá, ya lo hablamos.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Tenemos que hablar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Quién es este muchacho, Lidia?- preguntó
mi madre con la boca llena y con un tono que me pareció extraño, entre irónico
y de completa satisfacción.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-¿Todo bien, cuñá? – agregó mi padre con
el termo entre sus manos, como si fuese a usarlo para defenderse en caso de ser
necesario.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Sí, sí. Todo bien. Él es… un amigo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Yo abrí la boca para agregar que yo ya lo
conocía, pero me contuve.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Entonces no lo dejes ahí parado- dijo
papá. -Pase, pase, no se quede ahí. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mi tía bajó la cabeza y se corrió para
darle paso.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">-Carmen, traele una silla al muchacho.
¿Quiere un mate? Recién lo di vuelta. Mili, vení a saludar al señor. ¿Qué día
no? Qué calor espantoso. Dicen que de noche se pudre todo. Pero yo no creo más
en los meteorólogos. Tome, agarre un pedazo de rosca, está calentita, recién
salida de la panadería. ¿Cómo me dijo que se llamaba?...<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A mí la ansiedad me hizo huir y pedalear como
loca hasta la esquina. Llegué al almacén con una sonrisa, me detuve para
recuperar el aliento y ordenar mis ideas. Cuando di la vuelta ya pensaba en cómo
nos íbamos a arreglar, cómo íbamos a hacer para entrar todos en el chalecito.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; line-height: 115%;"><span style="font-size: x-small;">*Publicado en revista Lento, setiembre de 2013</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-18612124877040767152013-05-29T10:37:00.000-03:002015-06-19T23:05:27.023-03:00Papa sin sal<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://4.bp.blogspot.com/-aR626sV8dos/VQcG8C-U6ZI/AAAAAAAAD8g/GaqrWB1UTwM/s1600/mr%2Bpotatoe.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://4.bp.blogspot.com/-aR626sV8dos/VQcG8C-U6ZI/AAAAAAAAD8g/GaqrWB1UTwM/s1600/mr%2Bpotatoe.jpg" /></a></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">Hay personas que prefieren no enamorarse, que le
temen terriblemente al amor. El miedo a sufrir les hace desarrollar complejos
artilugios emocionales para detener cualquier indicio de palpitaciones, rubor
en las mejillas, falta de sueño o falta de aire. Lo que no quiere decir que no
escojan a alguien como su compañero de ruta. En ese caso eligen una papa sin
sal. La papa sin sal no irradia nada en particular. Ni alegría, ni sentido del humor,
ni sarcasmo, ni entusiasmo o pasión. Es una sombra. Marca territorio con sigilo,
porque sabe que cualquier cosa que fulgure puede llamar la atención de su
amante. Por eso no le pierde pisada. Se
mantiene cerca con promesas de estabilidad. Esto funciona por un tiempo. La
mansedumbre que le imprime a la relación podría ser irritante para cualquiera,
pero para el temeroso amado es cálida y reconfortante. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">La papa sin sal puede llegar a ser bella
físicamente, pero sin duda carece de atractivo. No tiene una risa contagiosa,
ni entusiasmo al hablar, ni una mirada intensa. Pasa desapercibida en grupos
grandes o pequeños. Que esté, o no esté, le es indiferente a la mayoría. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">Pero no nos engañemos: en el fondo, nadie quiere
estar toda su vida al lado de una papa sin sal. ¿Imaginan algo más aburrido que
eso? Alguien que sostiene, acompaña, soporta, sí, pero que no irradia luz
propia. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">Aunque no tengan nada en común, la papa sin sal se
amolda, se adapta, soporta, calla. Hará esfuerzos desmedidos por estar a la
altura, por mostrarse merecedor del cariño que recibe en cuentagotas. Lo que la
papa sin sal sabe, en el fondo, es que probablemente tiene los días contados.
Eso en el mejor de los casos. El rechazo inminente de su objeto de deseo puede llegar
a darle la oportunidad de tener un brote tierno y verde que busque por sí mismo
la luz del sol. Pero por lo general se olvida de sí misma y se pega a su presa,
la rodea con convicción, la convence de su amor incondicional, de que le está dando todo lo que necesita. Quien
antes temía al amor ahora ya ni se lo cuestiona; la compañía de la papa sin sal
es anestésica contra los dolores del mundo, sobre todo aquellos más terribles,
los dolores del amor.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-41888504929086312912013-04-08T17:09:00.000-03:002015-03-16T13:35:38.951-03:00Sabores de la granja<br />
<h1>
</h1>
<div class="MsoBodyText" style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://1.bp.blogspot.com/-1ehhE7oUagE/VQcGTUP-KCI/AAAAAAAAD8Y/qupkSfc3Frg/s1600/cat_food.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="http://1.bp.blogspot.com/-1ehhE7oUagE/VQcGTUP-KCI/AAAAAAAAD8Y/qupkSfc3Frg/s1600/cat_food.jpg" height="213" width="320" /></a></div>
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;"><br /></span>
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;"><br /></span>
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;">Una vez alguien se
sorprendió al darse cuenta que yo dormía igual que un gato, de costado, con los
brazos estirados hacia delante y las piernas recogidas. No me sorprendió la
observación. De hecho, no era algo nuevo para mí, que dormía así desde que era
una bebé. Dicen que las mascotas se parecen a sus dueños, pero me atrevo a
decir que es al revés: los dueños se parecen a sus mascotas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;">Mi amor por los gatos ha
sido de siempre. Ni siquiera recuerdo muy bien a mi primer gato, porque estaba
en casa cuando yo nací y murió cuando yo tenía tres años. Luego diferentes
gatos y gatas del barrio fueron haciéndose parte de la familia, algunos con más
frecuencia, con más expresiones de cariño o agradecimiento por la comida. De
los gatos aprendí muchas cosas. Que no hay excusa para no estar limpia. Que
dormir es un placer y una necesidad. Que el ronroneo es una de las mayores y
mejores expresiones de placer. Que atormentar cucarachas antes de darles el
golpe final es divertido. Que luego de una noche fuera de casa, al volver no
hay por qué dar explicaciones.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;">Mi vida se fue
desarrollando así, al ritmo de los gatos. Dormía de día, rodeada de ellos, y
salía de noche, a la hora que mis compañeros estaban más alerta que nunca. Me
bañaba antes de salir y me bañaba cuando volvía. Comía lo que me dejaran en la
heladera, pero mis platos favoritos eran arroz con atún y pollo al spiedo. Mi
familia no se preocupaba por mi ritmo de vida, creo que en el fondo les
divertía ver cómo los gatos habían influido en mi personalidad. Y si alguna vez
les molestaba algo, yo respondía siempre lo mismo: “Los que pusieron un gato en
mi cuna fueron ustedes, no yo”. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;">Cuando conseguí trabajo
me fui de casa. Ni el trabajo ni el monoambiente que alquilé eran gran cosa. En
el trabajo me costaba mantenerme despierta, y cuando volvía, lo único que
quería era dormir. Pero pronto empecé a dormirme en el trabajo. El día que el
jefe me descubrió por tercera vez y me echó, no le dije nada. Lo miré con odio
a través de mis ojos entrecerrados, y me fui en silencio, orgullosa. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;">En casa no hacía mucho.
Me tiraba en la cama a mirar tele con mis dos gatos. Veía todos los domingos
los avisos clasificados, pero no encontraba nada que se ajustara a mí. El
dinero comenzó a escasear y la heladera se vació. Los únicos que mantenían el
privilegio de la comida eran los gatos. No podía sacrificar su bienestar por
culpa de mi desempleo. Seguían comiendo comida para gatos, ahora una marca más
barata, pero que igual prometía deliciosos sabores de la granja, como pollo y
jamón. Ellos no se quejaban. Es más, esta comida parecía gustarles más. A mi el
ruido de las piedritas cayendo en los platitos me tentaba. Tenían un olor
fuerte, pero parecían crujientes, y por la ansiedad de los gatos al comerlas,
suponía que deberían ser sabrosas. Las empecé a comer como cereales en el
desayuno. Las cubría con leche y dejaba que se hincharan. Después pasaron a
formar parte de mi almuerzo y de mi cena. Al principio mi estómago hacía un
ruido infernal, pero eso solo duró un par de días. Cuando me aburrí de comer siempre lo mismo me llevé los gatos a la azotea para que cazaran palomas. El resultado
fue guiso de paloma para todos. Los gatos estaban locos de contentos. Pero mi
estómago ya se había acostumbrado a los sabores de la granja, y este cambio
repentino le afectó. Me desperté a medianoche con mareo, náuseas y chuchos de
frío. Corrí hacia el baño, me arrodillé sobre la alfombra, junto a la ducha, y
me preparé. Hice un ruido ahogado con la garganta, y en un segundo estaba
afuera. Mi primera bola de pelos. Inmediatamente me sentí mejor. Me lavé los
dientes y volví con los gatos, que apenas abrieron los ojos cuando me metí de
nuevo en la cama. </span><span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif";"><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoBodyText">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; font-size: 11.0pt; line-height: 150%; mso-bidi-font-size: 12.0pt;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-33599515662786886072013-02-25T23:37:00.001-02:002015-01-08T14:09:44.584-02:00Metamorfosis<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a tirar la remera de
Bowie.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a dejarme crecer el
pelo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a regalar los viejos
borceguíes.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a usar vestidos con
flores y lápiz labial. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a andar etérea,
flotando entre dos y tres centímetros del piso.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a rescatar gatitos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a hundir mis dedos en
un campo de trigo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a hablar con un murmullo
imperceptible.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a recoger las mejores
flores de mi jardín.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a bajar la mirada y
acariciar el cabello tras mis orejas.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a bailar sin mirar a
nadie.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Voy a tejer mi propio
capullo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;">Porque mi corazón es una
copa de cristal de Bohemia en precario equilibrio, un juguete melancólico entre
los dedos jabonosos de la noche.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-51252505418081035042012-10-08T14:16:00.003-02:002015-01-08T14:09:52.956-02:00Cómo matar a Lucy*<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; mso-ansi-language: ES-UY;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; mso-ansi-language: ES-UY;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: "Georgia","serif"; mso-ansi-language: ES-UY;">Por
primera vez en mi vida experimentaba un genuino deseo de matar.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;">La
acumulación de odio y frustración en el cuerpo te hace sentir enferma, como si
estuvieses enfrentando la gripe más resistente. Una no tiene dominio o control
del cuerpo, algo extraño se apodera del corazón y del resto de los músculos, se
fermenta la sangre, se estrecha la garganta y hay una descompensación en el
oxígeno que entra a destiempo en los pulmones.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;">El
deseo de matar tiene su clímax, éste se alcanza solamente una vez, cuando todas
las condiciones están dadas para que el cúmulo de energía llegue con éxito a su
destino. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;"> En mi caso bastó ver la cara de Lucy para que
los síntomas invadieran rápidamente mi cuerpo. Sentí un choque eléctrico en la
nuca, un estremecimiento y un mareo caluroso que me arrojó sobre ella. A través
de la niebla de mis ojos vi su carita tonta, su estúpido corte de pelo, sus
lentes asimétricos, su postura de perdedora, sus párpados caídos, las comisuras
dobladas en un gesto de prematura vejez. Es hermoso perder cualquier rastro de
racionalidad. Convertirse en un ser completamente salvaje y amoral, sin
obligación de cortesía. Es hermoso duplicar tus fuerzas físicas, reducir tu
cerebro al tamaño de una nuez, arrojarte con aplomo sobre la nariz puntiaguda y
brillante del enemigo, desencajarla en un par de segundos con el filo de tu
boca y hacerla sangrar después de un simple crac; arrancarle puñados de pelo en
tirones rápidos; hundir las rodillas en el abdomen contraído por el miedo;
patearle la cintura hasta dejarla morada; desgarrar con uñas de león sus
mejillas sonrojadas; todo eso hasta quedar exhausta, hasta que eso que se movía
y resistía no lo haga más. Primero arruinaste mi vida, y ahora me convertiste
en esto... Por favor Lucy, no me mires así. <span style="font-size: small;"><o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: x-small;"><br /></span></span></div>
<div class="MsoBodyText" style="line-height: 115%; text-align: justify;">
<span lang="ES-UY" style="font-family: Georgia, serif; line-height: 115%;"><span style="font-size: x-small;">*Montevideo, 2006.</span></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-58570662168686713742012-08-30T11:00:00.000-03:002015-01-08T14:10:19.592-02:00Un consejo<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">Cuando tenía doce años me dieron el mejor consejo
de mi vida. Lo hizo una tía abuela, un domingo caluroso, cuando preparábamos la
mesa para el almuerzo en su vieja casona del Prado. Mientras yo acomodaba la
vajilla inglesa ella encendió un Republicana sin filtro y tosió como un perro
enfermo. Sin preámbulos me preguntó si estaba enamorada. “Enamorada”. La
palabra me ruborizó. Le dije que no. Entonces esta mujer, que había conducido un
jeep militar con guantes de cuero, que había sido una especie de Mata Hari de
su época, me miró a los ojos, lanzó un humo espeso y me señaló con su dedo
huesudo. “Recordá esto que te voy a decir. Nunca te enamores de alguien que sea
menos inteligente y menos interesante que vos”. Yo sonreí con timidez, acomodé
los tenedores de alpaca y creí entender. Ella estaba sola, en una gran casa
llena de fantasmas, intentando salvarme. Sabía lo que decía. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-53214239825337310312012-07-26T00:18:00.001-03:002015-01-08T14:10:29.239-02:00Morrón y cuenta nueva<br />
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">Un día
nos conocimos y nos gustamos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">El
problema era que nuestros corazones estaban chamuscados y adoloridos. Cada vez
que nos acercábamos se contraían, reculaban, no querían saber de nada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">Así que
ante la incapacidad de ofrecernos mutuamente nuestros órganos, los sustituimos
por morrones. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">Morrones
recién arrancados. Rojos. Intensos. Brillantes. Perfumados.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">Se
adaptaron rápidamente a nuestros cuerpos. No latían como los corazones. Tenían
una vibración casi imperceptible y constante, un cosquilleo fresco que impulsaba
la sangre y erizaba los lóbulos de las orejas.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">Así es
como cada vez que escribía en mi libreta y pensaba en sus ojos, dibujaba un
pequeño morrón cruzado por una flecha. A su vez, un día de San Valentín recibí
por debajo de mi puerta una esquela que decía “Mi morrón te pertenece”. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;">Hoy somos felices. Cada vez que pasamos por delante de una verdulería y vemos un cajón
lleno de morrones, sonreímos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia; font-size: 11.0pt;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-10404511027199549792012-07-14T17:49:00.000-03:002015-01-08T14:10:50.906-02:00Cepillos<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">En el baño guardo una caja llena de cepillos de
dientes. Son de mis ex parejas o de personas que podrían haberlo sido, pero
dejaron su cepillo antes de que la relación prosperara.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">De hecho tengo una teoría: cuando alguien deja su
cepillo, es el principio del fin. Siempre ha sido así. Mis relaciones se
empiezan a deteriorar ni bien aparece un Colgate o Pico-Jenner en el vasito de
cerámica. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">Tengo de todos colores y en diferentes estados.
Rojos, violetas, azules, amarillos, naranjas; con mango ergonómico, futuristas
o de líneas simples; apenas usados o con las cerdas mirando hacia lugares
diferentes.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"> Cuando la
cajita se empieza a llenar, los voy sacando. Me sirven para remover el sarro del
desagüe de la pileta.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-74974347453643049602012-07-09T00:10:00.001-03:002015-01-08T14:10:58.782-02:00Globo de nieve<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;">Sacudo el globo de nieve en mi mano. Lo dejo sobre
el escritorio y apoyo la cara sobre mis brazos para ver la escena. Sé que va a
ser breve. Me las ingenio para meterme rápido, para verme y ver desde adentro de
la cúpula de vidrio. Las partículas blancas se van asentando en el suelo de
plástico. Pero para mí ya no es nieve falsa ni una representación tosca y mal
pintada de una ciudad. Ya es una calle fría en vísperas de navidad. Camino por
la acera húmeda que absorbe las luces coloridas de los escaparates. Levanto el
cuello de mi chaqueta de cuero y enciendo un cigarrillo. Mis botas viejas taconean firmes, espantan a los gatos vagabundos de las esquinas,
alertan a los drogones en los portales sucios. Busco un bar. Un lugar cálido
para escuchar canciones viejas y emborracharme. La nieve está amainando. El
cielo entre los edificios se aclara. Todo es demasiado silencioso. Un cartel de
neón me da la bienvenida. Quito la nieve de mis hombros; abro una puerta y
desaparezco. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
<br /></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-10214311.post-23835072479168686272012-05-07T10:27:00.000-03:002015-01-08T14:11:07.796-02:00Diseñador<br />
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Sos mi cian, magenta y amarillo.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Las combinaciones de vos me estimulan.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Tu perfume con tu lunar con tu sonrisa.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Tus cutículas con tus pestañas con tu pelo.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Tu silencio con tu sudor con tus ideas.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Tu ombligo con tus besos con tus orejas.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Sos mi paleta Pantone al 100%.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;">Piel sólido mate con aroma a papel recién impreso.</span></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<div class="MsoNormal">
<o:p><span style="font-family: Georgia, 'Times New Roman', serif;"><br /></span></o:p></div>
Natalia Marderohttp://www.blogger.com/profile/08870846174523811524noreply@blogger.com0